La Ciudad de México acaba de marcar un precedente histórico: a partir de ahora, en caso de divorcio, no solo se decidirá la custodia de los hijos, sino también la de las mascotas.
Con una reforma inédita, los jueces podrán determinar quién se queda con el perro, el gato o cualquier animal de compañía, garantizando su bienestar y reconociéndolos como seres sintientes dentro del núcleo familiar.
Con 57 votos a favor, 0 en contra y 0 abstenciones, el Congreso de la Ciudad de México aprobó la iniciativa conocida como “¿Con quién se queda el perro?”.
La propuesta fue impulsada por la diputada Luisa Fernanda Ledesma Alpízar, vicecoordinadora de la bancada de Movimiento Ciudadano, quien destacó que este avance legal busca garantizar la protección de los animales de compañía, reconociendo los vínculos emocionales que generan dentro de las familias.
¿De qué trata la Ley “Con quien se queda el perro” en CDMX?
A partir de esta reforma, las parejas que se divorcien podrán incluir en su convenio acuerdos sobre la custodia, manutención, visitas, atención veterinaria y plan de cuidados de sus mascotas. Esto implica que, al igual que sucede con los hijos, un juez podrá determinar quién se queda con el animal, así como establecer responsabilidades compartidas entre ambos cónyuges.
De acuerdo con la legisladora Ledesma Alpízar, esta medida busca evitar que un juez rechace una solicitud de divorcio por considerar que los acuerdos sobre mascotas no tienen validez legal. Ahora, los animales de compañía serán reconocidos como parte esencial del entorno familiar, y sus cuidados formarán parte de los procesos jurídicos.
🏛️🐾 El #CongresoCDMX aprobó que en casos de divorcio las mascotas puedan tener custodia compartida, garantizando su cuidado y bienestar. 💚🐶🐱 pic.twitter.com/BXbTKkjKWC
— Congreso de la Ciudad de México (@Congreso_CdMex) August 18, 2025
Ley “Con quien se queda el perro": Un avance histórico para las mascotas
Durante la sesión, Royfid Torres, coordinador de la Bancada Naranja, señaló que esta aprobación es un avance histórico en la protección de los seres sintientes, subrayando que las familias no deben entenderse únicamente desde lo biológico o legal, sino también desde el afecto y el cuidado compartido.
La diputada promovente añadió que el cuidado de los animales implica tiempo, recursos económicos y responsabilidad, por lo que resulta fundamental que estos aspectos se regulen al momento de una separación.