Miles de pacientes oncológicos en México, incluyendo niños y jóvenes, volvieron a manifestarse en varias ciudades como Jalisco, Tabasco y la CDMX para denunciar el grave desabasto de medicamentos contra el cáncer.

A mitad de agosto, aún faltan 8 fármacos vitales, poniendo en riesgo la vida de cientos de pacientes que enfrentan no solo la batalla contra el cáncer, sino también contra el abandono del sistema de salud. Su grito es claro: “No es un favor, es una obligación del gobierno”. La solidaridad y esperanza de estas familias mexicanas se mantienen intactas mientras demandan una respuesta urgente y un alto a esta crisis sanitaria.

Pacientes con cáncer exigen medicamentos oncológicos en México

Pacientes que luchan contra el cáncer retomaron las calles de varias entidades mexicanas para exigir al gobierno que garantice el suministro de medicamentos y tratamientos oncológicos indispensables. La protesta nació en Jalisco y se replicó en Tabasco, CDMX y otros estados, donde niños, jóvenes y adultos enfrentan el doble desafío del cáncer y el desabasto en los hospitales.

El desabasto afecta ya 8 medicamentos clave, a pesar de que ya estamos a mitad de agosto. Los pacientes y sus familias denuncian que “no queremos la medicina en una bodega, la queremos en los hospitales y clínicas donde se necesita” y alertan que los niños están en urgencias sin antibióticos ni fármacos esenciales.

El grito de ayuda de Sofía: La protesta que exige medicinas para niños con cáncer

La protesta representa a cientos de pequeños guerreros como Isaac, Ainoa, Miguel, Gerardo, Sofía y Estrella. Una de ellas, Sofía Márquez, paciente con cáncer, dice: “Que den el medicamento y que ya no jueguen con nosotros”. Sin el acceso a medicinas, muchos sueños se quedan truncados, como el de Luis, quien soñaba con ser abogado, pero perdió la batalla contra la enfermedad.

Este desabasto no es solo una crisis de insumos, también es un reflejo de una “herencia maldita” que ha deteriorado la salud pública en México. Equipos médicos obsoletos, falta de medicamentos y la falta de una respuesta gubernamental se suman a la tragedia que viven estas familias.

A pesar de la difícil situación, la solidaridad entre los mexicanos se mantiene fuerte, brindando esperanza y aliento a los pacientes; sin embargo, exigen que las autoridades escuchen este grito desesperado: “Gobierno, escucha. No es un favor, es tu obligación”. Quieren medicamentos en hospitales y una solución clara para que estas batallas se ganen dentro de los centros de salud y no en las calles.