El gobierno federal, encabezado por Claudia Sheinbaum, señala un “incumplimiento de contratos” por parte de las empresas farmacéuticas como la causa principal de la persistente escasez de medicamentos en el país. Tras meses de promesas incumplidas, la administración ahora amenaza con denuncias penales contra los proveedores.
Mientras tanto, pacientes con enfermedades crónicas y cáncer enfrentan un calvario diario, gastando miles de pesos de su bolsillo para conseguir tratamientos vitales. La incertidumbre y el temor crecen entre los ciudadanos, quienes exigen soluciones inmediatas y no más pretextos ante una crisis que pone en riesgo sus vidas.
¿Por qué sigue el desabasto de medicamentos en México?
Desde principios de año, la garantía de un abasto completo de medicamentos ha sido una promesa recurrente del gobierno. En enero, la presidenta Claudia Sheinbaum reconoció la problemática y fijó un plazo de dos meses para resolverla. “A todas las personas que llegan a su Centro de Salud y por alguna razón no hay un medicamento o al hospital, eso: el objetivo es resolverlo en estos dos meses con la compra complementaria que se hizo”, afirmó entonces.
Sin embargo, el plazo se extendió de marzo a junio, luego a julio y después a agosto, sin que los anaqueles de las farmacias de los hospitales públicos se llenaran por completo, dejando a miles de pacientes en el desamparo.
Tan cerca del desabasto y tan lejos de Dinamarca: sistema de salud reconoce falta de medicamentos
Gobierno de Sheinbaum acusa a farmacéuticas por incumplir contratos
Ante la falta de resultados, el discurso oficial ha dado un giro drástico. Hoy, la administración apunta directamente a las empresas proveedoras como las responsables del desabasto. “Hay algunos casos de medicamentos que ya fueron adquiridos y la empresa no los ha entregado, se están incumpliendo los contratos”, declaró recientemente la presidenta Sheinbaum.
Esta postura fue secundada por el subsecretario de Salud, Eduardo Clark, quien enfatizó: “No podemos llegar al 100% si los proveedores que asumieron compromisos formales con el Gobierno de México no los cumplen”. La tensión escaló al punto de amenazar con acciones legales severas. “Ahí donde se encuentre que es malintencionado, digamos, tiene que haber denuncia penal. No solamente que no se vuelva a comprar a estas empresas, sino denuncia penal”, sentenció Sheinbaum.
Pacientes de cáncer y diabetes: El alto costo de la escasez de medicinas
Mientras las autoridades y las farmacéuticas intercambian culpas, los ciudadanos son las víctimas directas de esta crisis. El impacto económico y emocional es devastador para quienes dependen de un tratamiento.
“Yo soy diabética, y tengo que comprarlos con mi dinero, porque ni siquiera nos dan una receta extra. Simplemente, tomo una que se llama Trayenta y nos cuesta mil 200, gastó como 2 mil 500 en los dos medicamentos que me hacen falta”, relata Laura Merino, paciente del IMSS.
La frustración es palpable, especialmente entre quienes esperaban una mejora en el sistema de salud. “Los casos son más sonados de personas con cáncer que no tienen los medicamentos, ¿no? Y pues me da risa que supuestamente en este gobierno iba a ser como más, pues, esta parte de la salud, pero, pues no”, comenta Brian Marbán, estudiante de medicina.
Para pacientes como Esperanza, la petición es simple y directa: “-¿Qué le pediría a las autoridades? —Pues que le den a todas las personas la medicina que necesita”. Lo peor, coinciden muchos, es el temor a que el día que lleguen sus medicinas, podría ser demasiado tarde.