Un caso insólito y alarmante sacude a Perú, luego de que un suboficial de la Policía Nacional, identificado como Jasand Barrios, fue detenido por presunta extorsión, pero lo que ocurrió durante su captura ha generado indignación y asombro en todo el país; según la Fiscalía, Barrios intentó comerse los billetes que habría recibido como parte del pago exigido a su víctima.
Este lamentable hecho quedó registrado en video durante un operativo fiscal en la provincia de La Convención, en la región Cusco. La víctima, que resultó ser otro policía, pero de menor rango, denunció que el suboficial le exigió 15 mil soles, equivalentes a cerca de 82 mil pesos mexicanos, a cambio de no perjudicarlo en un proceso interno.
Increíble, pero real: policía de Perú intenta tragarse unos billetes que habría recibido por extorsión
De acuerdo con la Fiscalía Anticorrupción de La Convención, los agentes decidieron adelantar el operativo porque Barrios insistía en contactar al denunciante de manera sospechosa. Al momento de ser abordado en su vehículo, el suboficial se cubrió el rostro e hizo movimientos que dificultaban ver lo que hacía.
Segundos después, y ante el requerimiento de la fiscal para que bajara del auto, salió abruptamente, sorprendiendo a todos. Fue entonces cuando los agentes advirtieron que había estado introduciendo billetes en su boca para intentar destruir la evidencia. El presidente de la Junta de Fiscales, Manuel Mayorga, confirmó que “el investigado se comió los billetes, aparentemente para no dejar rastro del pago ilícito”.
Increíble: suboficial peruano se come los billetes exigidos en un escándalo de extorsión
La víctima, que ha optado por mantener su identidad en reserva por temor a represalias, declaró junto a su abogado que el suboficial Barrios lo había presionado de manera sistemática para entregarle el dinero exigido. Este testimonio motivó la rápida intervención de las autoridades.
Luego de la fuga inicial del suboficial, la Fiscalía allanó la oficina de Inspectoría de la Policía en La Convención, dirigida por la coronel Edith Espejo, quien también fue detenida. Durante el operativo, la coronel se desmayó, por lo que tuvo que ser auxiliada de inmediato. Días después, Barrios regresó a la comisaría, acompañado de su abogado.
Ambos detenidos permanecerán 72 horas bajo investigación, mientras se recogen pruebas y declaraciones para determinar el alcance de este presunto caso de corrupción policial. Este episodio vuelve a poner sobre la mesa una pregunta urgente: ¿hasta cuándo los casos de corrupción seguirán erosionando la confianza en las instituciones policiales de Perú?