La Familia Michoacana buscó expandirse en el mundo del crimen organizado, extorsionando a pobladores en el Estado de México (Edomex). Para ello, se aprovechó de los giros comerciales de muchos ciudadanos, a quienes amenazó hasta controlar la industria de la construcción.

Un informe de la Fiscalía General de Justicia estatal señala que el grupo criminal recurrió a una forma de intimidación hasta crear un esquema de abuso y amenazas en las actividades económicas de la región.

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Aumentando los precios de los negocios en el Edomex

La organización buscó controlar negocios en 14 municipios del Estado de México, sin embargo, aunado al terror de las amenazas, esta situación generó que hubiera un incremento a los precios de ciertos productos, algo que impactó de manera directa a los consumidores.

Las autoridades identificaron 63 establecimientos comerciales, donde se ejecutaron operativos para debilitar a La Familia Michoacana. Los municipios son:

  1. Amanalco
  2. Donato Guerra
  3. Ixtapan de la Sal
  4. Ixtlahuaca
  5. Malinalco
  6. San Felipe del Progreso
  7. Sultepec
  8. Tlatlaya
  9. Tejupilco
  10. Temascaltepec
  11. Tenancingo
  12. Texcaltitlán
  13. Valle de Bravo
  14. Villa Victoria

Agentes, a través de la Operación Liberación, detuvieron a ocho presuntos delincuentes supuestamente relacionados con extorsiones para financiar a la organización criminal, afectando negocios de:

  • Minas
  • Comercializadoras
  • Distribuidoras de materiales de construcción
  • Ferreterías
  • Criaderos de pollo, cerdo y otros semovientes, de huevo y cárnicos
  • Transporte de carga y manipulación de paquetería

La Familia Michoacana y el control de la venta de material de construcción

Los detenidos se hicieron pasar por comerciantes, líderes sindicales y servidores públicos, que convivían en el día a día en las comunidades, pero también, eran empresarios que dañaban económicamente a los pobladores.

Uno de los detenidos es Eli “N”, propietario de una casa de venta de materiales y almacén denominada “JIMEX”, ubicada en el municipio de Valle de Bravo.

Era el único autorizado por La Familia Michoacana para la distribución y venta de cemento y materiales de construcción en esa región.

Este control hizo que nadie construyera nada si el material no era comprado en esta empresa al precio que él imponía. Aunque, no solo eso, sino que es señalado por extorsión y secuestro con fines de extorsión.

Un sindicato y La Familia Michoacana para operar en el Edomex

A la lista de los posibles responsables de controlar el comercio en la entidad, se suma Gonzalo “N”, líder del Sindicato Bradosva, como el único autorizado para suministrar y distribuir materiales de construcción como arena, grava y varilla, y el único autorizado para mover los materiales de esa mina y favorecer así a Eli “N”.

Gonzalo “N” también es indagado por extorsión agravada, pues cuando alguien o una constructora independiente intentaban trasladar materiales de construcción en vehículos que no fueran del Sindicato Bradosva, exigía dinero a los choferes y responsables a cambio de no quemar o tirar su obra, e incluso llegó a secuestrarlos.

Eli “N” y Gonzalo “N” controlaban de manera violenta la industria de la construcción en Valle de Bravo y municipios aledaños, y para ello presuntamente sometían a otros comerciantes y clientes con el apoyo de La Familia Michoacana.

‘Levantones’ y precios altos para controlar el mercado de la construcción en Edomex

En esta operación delictiva se encuentra Alicia “N”, responsable de la contabilidad y operaciones financieras de establecimientos destinados a la venta de materiales en Ixtapan de la Sal y municipios aledaños.

Ahora es investigada por extorsión agravada, pues presuntamente obligaba a los clientes de los establecimientos a adquirir productos con incrementos del 20 por ciento, sin embargo, quien se negara a ello, era amenazado con que “los levantarían o hasta los matarían”.

Esta mujer, además, supuestamente se encargaba de persuadir a los clientes y los alojaba en un hotel que ella administraba. Es pareja de otro de los detenidos identificado como Jorge “N” y prima de Yareli “N”, otra de las detenidas.

Ni un polín a la venta: controlando todo el material para construir

El sujeto llamado Jorge “N”, era líder de madererías en el municipio de Valle de Bravo, al igual que Eli “N” y Gonzalo “N”, en Valle de Bravo, y al parecer no se podía alquilar o vender un solo polín o tabla sin que fueran comercializados por Jorge “N”, esto incluía maderas finas para interiores de cabañas y fincas.

También es investigado por extorsión agravada, pues en marzo de 2025, habría amenazado a un comerciante de madera, a quien al parecer le exigió 100 mil pesos para que pudiera continuar vendiendo y tendría que entregarle una cuota mensual de acuerdo con lo vendido y solo debía comprarle madera a él.

Yareli “N” era cuarta regidora municipal y al parecer laboraba para La Familia Michoacana. Fue detenida por secuestro exprés con fines de extorsión. En abril pasado habría participado en la privación de la libertad de un comerciante de muebles, en el municipio de Ixtapan de la Sal.

La víctima fue trasladada a una habitación de un hotel, a donde ingresó ella, quien le habría exigido una “cuota o de lo contrario le daría piso a él y a su familia”.

Otro de los detenidos es José Fernando “N”, dueño de madererías en Ixtapan de la Sal. El probable implicado al parecer aumentaba el precio de la madera para entregar el dinero a integrantes del grupo delictivo y llevaba a cabo trabajo de logística por medio de taxistas.

Fue capturado por extorsión, pues en enero de 2025, en Ixtapan de la Sal, habría indicado a una persona que debía pagar 20 por ciento más del costo total por la compra de productos maderables.

Un hombre llamado Antonio “N” es presunto integrante de un grupo delictivo y quien era encargado de la
distribución y venta de carne en los municipios de Almoloya de Alquisiras, Sultepec y Texcaltitlán, mismo que a través de un establecimiento comercial ubicado en este municipio al parecer imponía a los clientes una suma económica de 5 pesos por cada kilogramo que pesaban las cabezas de ganado que llevaban.

Mientras que Bernardo Alejandro “N”, capturado el 22 de julio, en colaboración con la Fiscalía de Quintana Roo, era presunto encargado, por parte de La Familia Michoacana, de la venta de pollo a comerciantes del municipio de Ixtapan de la Sal.