Después de años de tensionestras el referéndum de 2016, Europa y el Reino Unido han alcanzado un acuerdo trascendental que redefine su relación en la era posterior al Brexit. El pacto fue anunciado oficialmente durante una cumbre celebrada este lunes en Londres, luego de meses de negociaciones intensas entre Downing Street y Bruselas.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el primer ministro británico, Keir Starmer, calificaron el acuerdo como “histórico” y destacaron que representa el inicio de un “nuevo capítulo” en la compleja relación entre ambas partes.
¿Cuál es el propósito de retomar relaciones entre Europa y Reino Unido?
Entre los puntos centrales del acuerdo se encuentran nuevas disposiciones que flexibilizan los viajes y el acceso al trabajo para millones de ciudadanos tanto del bloque europeo como del Reino Unido. También se incluyen compromisos importantes en defensa, comercio, migración y acceso a mercados estratégicos.
Uno de los logros más relevantes es el establecimiento de un esquema de movilidad juvenil, que permitirá a personas menores de 30 años viajar y trabajar en ambos territorios. Aunque no se ha restaurado la libertad de movimiento que existía antes del Brexit, este avance representa una mejora considerable en las oportunidades para jóvenes europeos y británicos.
Además, el Reino Unido volverá a participar en el programa Erasmus, lo que permitirá a estudiantes británicos estudiar en universidades de la Unión Europea, fomentando la integración educativa y cultural a largo plazo.
¿Cómo afectó el Brexit a Reino Unido?
Uno de los puntos más críticos desde el Brexit ha sido la burocracia comercial que afectó negativamente a productores, exportadores e importadores. Con el nuevo acuerdo, se reducirán significativamente los controles rutinarios sobre productos animales y vegetales, algo que beneficiará directamente al sector alimentario británico y europeo.
La creación de una zona común sanitaria y fitosanitaria contribuirá a ofrecer estabilidad a agricultores, pescadores y empresas del sector. Keir Starmer aseguró que estas medidas ayudarán a reducir los precios de los alimentos y a aumentar la variedad de productos disponibles en los supermercados del Reino Unido.
Pese a los avances, Londres mantiene fuera del pacto su reincorporación al mercado único o la unión aduanera, dos elementos considerados “líneas rojas” por el actual gobierno británico.
Europa busca hacerle frente a las amenazas externas
Otro eje fundamental del acuerdo es la creación de una nueva alianza defensiva entre el Reino Unido y la UE. Esta colaboración estratégica permitirá a empresas británicas participar en licitaciones de seguridad a nivel europeo y fortalece la preparación militar conjunta, especialmente tras la invasión rusa de Ucrania y las dudas sobre el compromiso de Donald Trump con la defensa europea.
Ambas partes se comprometen a adquirir equipos conjuntamente, cerrar brechas en sus capacidades militares y garantizar la seguridad del continente sin depender exclusivamente de la OTAN o de garantías estadounidenses que se perciben cada vez menos fiables.
Reacciones mixtas en el Reino Unido
Aunque el acuerdo ha sido bien recibido por sectores centristas y por el empresariado, sin embargo, ha provocado duras críticas de parte de la derecha populista británica. El líder de Reform UK, Nigel Farage, afirmó que el Reino Unido se está convirtiendo nuevamente en un “tomador de decisiones de Bruselas”.