La tensión en Europa del Este volvió a escalar este julio de 2025 tras la intensificación de los ataques rusos contra Ucrania y la creciente participación de Corea del Norte, que anunció su respaldo absoluto a las acciones militares del Kremlin. Durante una reunión en la ciudad costera de Wonsan, el líder norcoreano Kim Jong-un recibió al canciller ruso Sergei Lavrov, a quien transmitió su apoyo incondicional a todas las operaciones de Rusia en Ucrania.

Según reportes de inteligencia ucraniana, Pyongyang ya habría enviado más de 11 mil soldados al frente oriental del conflicto, y estaría preparando el despliegue de hasta 30 mil efectivos más en apoyo directo a Moscú. Este movimiento refuerza la creciente alianza política y militar entre Rusia y Corea del Norte, que ha evolucionado rápidamente desde el inicio de la guerra en febrero de 2022.

Rusia lanza el mayor ataque con misiles y drones desde 2022

Como parte de este nuevo impulso bélico, Rusia ejecutó en días recientes su ofensiva aérea más agresiva desde el inicio del conflicto. De acuerdo con el Ministerio de Defensa de Ucrania, las fuerzas rusas lanzaron 13 misiles y 728 drones de ataque, de los cuales las defensas ucranianas lograron interceptar 711 drones y 7 misiles.

Las autoridades reportaron que al menos 11 regiones de Ucrania resultaron afectadas por esta ofensiva. La zona más golpeada fue la ciudad de Lutsk, en el noroeste del país, donde se registraron severos daños a infraestructura energética y civil. Fuentes locales advierten de heridos y fallecidos aún sin identificar, debido al colapso de edificios y cortes de electricidad.

Mientras tanto, Kim Jong-un inaugura complejo turístico en la costa este

Por su parte, en un gesto que contrasta con la gravedad del conflicto, Kim Jong-un aprovechó la jornada para inaugurar un nuevo complejo turístico en la costa este de Corea del Norte, incluso mientras su país moviliza tropas para un conflicto internacional.

Desde Bruselas hasta Washington, la posibilidad de que Corea del Norte envíe un contingente militar de hasta 30 mil soldados desencadenar un punto de inflexión que podría redefinir el equilibrio del conflicto en Europa.