El parque Disneyland California, epicentro del entretenimiento familiar desde 1955, ha sorprendido al mundo este con una experiencia completamente innovadora: la presentación del primer animatronic hiperrealista de Walt Disney, el creador del universo que transformó la cultura popular. Esta propuesta tecnológica y narrativa, titulada “Walt Disney: Una Vida Mágica”, será parte central de las celebraciones por el 70º aniversario del parque.
La atracción, desarrollada por el equipo de Walt Disney Imagineering, se estrenó este jueves 17 de julio, justo el mismo día en que Disneyland abrió sus puertas hace siete décadas. El escenario elegido para su debut es la renovada Main Street Opera House, uno de los edificios más emblemáticos del parque.
Animatronic cuenta la historia de Walt Disney
Concebida como una experiencia biográfica inmersiva, la atracción reconstruye momentos clave de la vida de Walt a través de imágenes, sonidos y tecnología robótica. El animatronic de Walt Disney, vestido con un traje inspirado en el año 1963, es el punto culminante del recorrido. La figura se pone de pie al final del espectáculo y dirige unas palabras al público con fragmentos originales de su voz, restaurados digitalmente.
Este proyecto tardó más de siete años en concretarse, con un proceso que combinó investigación de archivo, modelado facial en 3D, restauración sonora y avances en ingeniería robótica. Por primera vez, se logra una figura totalmente eléctrica capaz de realizar movimientos como pasar de una posición sentada a erguirse con naturalidad, técnica conocida como lean-to-stand.
Un viaje por el legado de Disney: Este fue el motivo por el que se construyó
Antes de ingresar al teatro principal, los visitantes podrán recorrer una exposición titulada “Evolution of a Dream”, que narra la transformación del concepto original de Walt (un parque para disfrutar con sus hijas) en el fenómeno global que es hoy Disneyland.
La muestra incluye bocetos, planos originales, objetos personales inéditos, piezas de archivo cedidas por el Walt Disney Family Museum, así como colecciones icónicas como las orejas de Mickey en sus diferentes versiones y artefactos culturales que retratan cómo ha cambiado el perfil del visitante en estos 70 años.
El entorno escénico recrea el estudio de Walt en Burbank, desde donde el animatronic comienza en actitud contemplativa y luego cobra vida en interacción directa con el público.