El senador del PRI, Alejandro Moreno, expresó su firme rechazo a los aranceles recientemente impuestos por Estados Unidos al comercio con México.
PRI reprueba aranceles de EU pero exige combate serio al crimen organizado en México
A través de un comunicado difundido en sus redes sociales, Moreno aseguró que dicha medida representa un daño directo a la sociedad mexicana, pues afecta a múltiples sectores económicos y potencia la incertidumbre comercial.
El legislador subrayó que su partido condena esta decisión puesto que golpea injustamente a la economía nacional y a las familias mexicanas, sin embargo, también aclaró que los legisladores del PRI no permitirán la complicidad con los cárteles del narcotráfico, situación que ha sido objeto de denuncias por parte del gobierno estadounidense.
En palabras de Moreno, “no se puede exigir respeto internacional cuando se gobierna de la mano de delincuentes”.
Los sectores más afectados por el aumento de aranceles
Los aranceles impuestos por Estados Unidos han tenido un impacto significativo en industrias que dependen fuertemente de insumos importados.
Sectores como el automotriz, la maquinaria industrial, dispositivos electrónicos y electrodomésticos han reportado incrementos en sus costos operativos. Esto se debe a que estas empresas utilizan una gran cantidad de bienes intermedios provenientes de México y ahora enfrentan impuestos adicionales que encarecen la producción.
Más allá del impacto financiero inmediato, la administración Trump sostiene que estos aranceles buscan un objetivo a largo plazo: incentivar el traslado de operaciones industriales hacia Estados Unidos. Según esta visión, relocalizar fábricas podría reducir la dependencia de insumos extranjeros y reactivar la industria manufacturera doméstica, generando más empleos en suelo estadounidense.
Impacto de impuestos de EE.UU.: ¿Aumento de precios y tensiones comerciales?
A pesar de que la capacidad recaudatoria de Estados Unidos ha llegado a niveles récord gracias a estos impuestos, varios analistas advierten sobre las consecuencias inflacionarias. Si los costos adicionales se trasladan a los precios al consumidor final, la inflación podría aumentar, afectando la economía interna de ambos países.
Además, existe la preocupación de que México o incluso otros socios comerciales implementen represalias, lo que podría desencadenar nuevas tensiones y conflictos comerciales que lastimen el comercio internacional.