El Departamento de Estado de Estados Unidos ordenó a sus embajadas y consulados en todo el mundo reanudar de forma inmediata la tramitación de visados para estudiantes de la Universidad de Harvard. La medida representa una victoria significativa para la institución académica y un revés directo para la administración del presidente Donald Trump, forzada a acatar una orden judicial que paralizó su más reciente intento de bloquear la llegada de talento internacional al país.
El enfrentamiento, que se ha desarrollado tanto en los tribunales como en las oficinas diplomáticas, evidencia la profunda tensión entre las políticas de inmigración de la actual Casa Blanca y el sistema judicial estadounidense.
La decisión de reanudar el procesamiento consular no es un gesto voluntario, sino la consecuencia directa de una batalla legal que apenas comienza.
La justicia frena el bloqueo presidencial
Un cable diplomático (mensaje confidencial diplomático), enviado a todas las misiones estadounidenses, cambió el curso de la decisión de Trump.
Apenas días después de haber instruido a los oficiales consulares que rechazaran las solicitudes de visa de estudiantes e investigadores con destino a Harvard, una nueva directriz invalidó por completo la orden anterior.
A federal judge temporarily blocked an order by Trump effectively banning foreign students and teachers from entering the U.S. to attend Harvard University.https://t.co/nqaXJ3WQ27
— CBS 21 News (@CBS21NEWS) June 6, 2025
El documento confirma: “Con efecto inmediato, las secciones consulares deben reanudar la tramitación de los visados de estudiantes y visitantes de intercambio de la Universidad de Harvard”.
El texto, que lleva la firma del actual secretario de Estado, Marco Rubio, subraya además que “no debe rechazarse ninguna solicitud de este tipo” en virtud de la proclamación presidencial.
Este retorno al “procesamiento estándar”, como lo describe el propio Departamento de Estado, es un reconocimiento explícito de que deben adherirse al fallo de la corte, al menos por ahora.
Pulso de poderes en la corte
La figura central en este revés es la jueza de distrito de Estados Unidos, Allison Burroughs. Fue su decisión de emitir una orden de restricción temporal la que detuvo la aplicación de la directiva presidencial.
La jueza Burroughs actuó tras escuchar los argumentos de Harvard, que alertó sobre las dificultades y rechazos que ya estaban sufriendo sus futuros estudiantes en diversas embajadas, poniendo en jaque el inicio de sus programas académicos.
Aunque la jueza expresó su preocupación por los obstáculos ya generados, su orden busca restablecer la situación al estado previo al bloqueo.
Se trata de una “lucha judicial en curso” y se espera otra audiencia clave en los tribunales la próxima semana, donde se determinarán los siguientes pasos.
At least 10 incoming Harvard students and scholars had visa applications refused for “administrative processing” after the Trump administration revoked the University’s ability to enroll international students.@samuelachurch and @camsrivastava report.https://t.co/gXtu0YXvWr
— The Harvard Crimson (@thecrimson) June 6, 2025
Mientras los consulados se preparan para acatar la nueva orden, la batalla legal de fondo sobre el futuro y el estatus de los estudiantes internacionales en Estados Unidos apenas ha iniciado en medio de la incertidumbre en la era Trump.
