El reciente fallecimiento del papa Francisco despertó el interés sobre el protocolo funerario a seguir en este caso. Desde su elección en 2013, Jorge Mario Bergoglio, nombre real del pontífice, ha enfrentado diversos problemas de salud, lo que llevó a la Santa Sede a actualizar los ritos funerarios tradicionales.
La nueva edición del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, aprobada el 29 de abril de 2024, introdujo cambios significativos en la ceremonia, con el fin de simplificar y modernizar el proceso.
¿Qué cambios tendrán los funerales del papa Francisco?
Los cambios en el ritual funerario fueron impulsados por el propio deseo del papa Francisco de que las exequias reflejen mejor la fe de la Iglesia en Cristo resucitado. Entre las modificaciones más destacadas se encuentran:
- Eliminación de los tres ataúdes tradicionales: En lugar de los féretros de ciprés, plomo y roble, usados en ocasiones anteriores, se utilizará un único ataúd de madera con revestimiento interior de zinc.
- Comprobación de la muerte: Este procedimiento ya no se realizará en la habitación del difunto, sino en una capilla privada.
- Exposición del cuerpo: El cuerpo del Papa será depositado inmediatamente en el ataúd y expuesto para la veneración de los fieles dentro del féretro abierto, eliminando la tradicional colocación sobre un catafalco, que era una plataforma adornada para este fin.
- No será necesario enterrar el cuerpo en el Vaticano: El cuerpo del pontífice podrá ser inhumado en otra parte distinta a la basílica vaticana. Para el papa Francisco, él manifestó que desea ser enterrado en la basílica de Santa María la Mayor en Roma.
¿Por qué cambió el ritual funerario del Papa?
Estas reformas tienen como objetivo hacer que los actos protocolarios sean menos ceremoniosos y más accesibles para los fieles, alineándose con el enfoque pastoral del Papa Francisco.
Con estas actualizaciones, el Vaticano busca no solo honrar al Papa Francisco, sino también adaptar las tradiciones a las realidades contemporáneas, asegurando que las exequias sean un reflejo auténtico de la fe católica.
¿Cómo fue el funeral del papa Juan Pablo II?
El papa Juan Pablo II murió el 2 de abril de 2005, la misa de su funeral estuvo presidida por el entonces cardenal alemán Joseph Ratzinger, quien se convirtió en pontífice y se le conoció como Benedicto XVI.
El funeral se realizó el 8 de abril de ese año y estuvieron presentes 164 cardenales, entre ellos, Jorge Mario Bergoglio. El cuerpo de Juan Pablo II se colocó en un triple ataúd (hecho de ciprés, zinc y olmo) y su rostro fue cubierto con un velo de seda.
El féretro se colocó frente a la Basílica de San Pedro, hasta donde llegaron miles de fieles para darle el último adiós al papa; también acudieron 200 jefes de Estado. Su cuerpo fue inhumado en la cripta de la misma Basílica, conocida como las Criptas Vaticanas, como el mismo Karol Wojtyla lo dispuso en su testamento.