Organizaciones defensoras de los derechos humanos han lanzado una contundente exigencia al gobierno de Donald Trump para cerrar de inmediato el centro de detención migratoria conocido como Alligator Alcatraz, en Florida.
En la actualidad y conforme a reportes confirmados por la organización Human Rights Watch, en el centro de detención permanecen al menos 14 ciudadanos mexicanos, entre ellos Carlos Martín González y su hermano, quienes ingresaron legalmente al país y fueron detenidos después de una supuesta infracción de tránsito.
¿Qué denuncian los grupos de derechos humanos?
Los grupos defensores de los derechos humanos acusan condiciones inhumanas, sobrepoblación y abuso sistemático contra los detenidos. Durante una protesta efectuada frente a las instalaciones, los manifestantes gritaron “¡Ciérrenlo, ciérrenlo, ciérrenlo!”, mientras sostenían pancartas denunciando las violaciones sistemáticas a los derechos humanos dentro del centro.
La activista Belkis Wille, de Human Rights Watch, advirtió que la situación no se debe a falta de recursos, sino a abusos intencionales:“Estos son los tres centros de Florida que albergan a la mayor cantidad de personas, y donde las prácticas abusivas se han hecho más evidentes”, asegura Wille, señalando también a los centros de detención operados por el ICE.
¿Cuáles son las condiciones en Alligator Alcatraz?
De acuerdo con testimonios de los internos y defensores migrantes, las condiciones son insalubres y degradantes; entre las denuncias se destaca que:
- Los sanitarios no se limpian por días
- Los detenidos comen esposados, con las manos en la espalda
- Se les niega el acceso a atención médica, incluso en casos urgentes.
Belkis Wille también ha denunciado que, debido a la negligencia médica, al menos dos personas habrían muerto en instalaciones similares.
Ante la situación, Organismos como la Coalición Migrante de Florida instaron al gobierno de Trump a cerrar de inmediato el centro de detención y liberar a los detenidos sin cargos graves.
Tessa Petit, representante de la organización, comparó la situación en el centro de detención migratoria con campos de detención históricos, calificándola como una “repetición de lo ocurrido en Alemania”.