El estruendo de la represión y los incidentes provocados por grupos radicales no opacaron las exigencias de seguridad y justicia que miles de personas expresaron durante la marcha de la Generación Z del sábado 15 de noviembre.
Aunque desde el Gobierno Federal intentaron descalificar a los asistentes al enfocarse en su edad o en la forma en que fueron convocados, los contingentes insistieron en que sus demandas respondían a problemas reales que viven todos los días.
Las calles reunieron a ciudadanos de distintos estados que coincidieron en un mismo mensaje: la violencia, el abandono institucional y la crisis en servicios básicos habían hecho insostenible su vida cotidiana.
¿Por qué marcharon miles de personas el sábado?
Los motivos variaron según cada contingente, pero todos coincidieron en que la inseguridad y la falta de respuestas oficiales los obligaron a salir a las calles. Desde asesinatos de autoridades locales, extorsiones, crisis hospitalaria, violencia contra docentes y desapariciones, los testimonios reflejaron un país con múltiples pendientes.
Michoacán exigió justicia por el asesinato de Carlos Manzo
Un numeroso grupo proveniente de Michoacán encabezó la marcha con un reclamo central: justicia para Carlos Manzo, alcalde asesinado tras pedir apoyo a las autoridades federales. Para ellos, la muerte del exedil representó lo que muchas comunidades enfrentan diariamente.
“Él no murió, el gobierno lo mató”, gritó Rachel Ceja, abuela de Carlos Manzo.“Me quitó la vida a mí también… que se haga justicia.”
Otros señalaron que el crimen organizado operaba bajo extorsiones constantes:
“Estamos hartos de vivir extorsionados, amenazados, intimidados... venimos a que se escuche nuestra voz.”, dijo Lorena Valladares, habitante de Uruapan.
El sector salud denunció abandono y fallecimientos que se pudieron evitar
Personal médico denunció el deterioro de los servicios de salud y la falta de insumos.
“Tengo que ver a pacientes complicarse, pacientes morir por la ineptitud de este gobierno”, relató un médico que decidió sumarse a la marcha.
Docentes reclamaron seguridad y mejores condiciones laborales
Desde Oaxaca llegó un contingente del sector educativo para exigir garantías en el ejercicio de su profesión.
“Acaban de matar a una maestra en Juchitán… por eso vengo en la marcha contra la inseguridad.” , explicó uno de los participantes.
Familias de desaparecidos marcharon por quienes ya no pueden hablar
Las familias de personas desaparecidas también alzaron la voz recordando que la violencia no daba tregua.
“¿Cuántas muertes de mujeres más? ¿Cuántos desaparecidos? Nuestro país está ensangrentado.” , expresó una de las voces que marcharon en busca de justicia.
Los gritos desesperados de quienes viven "en el México real", como dijeron los manifestantes, contrastaron con la narrativa oficial que, según ellos, no reflejaba la magnitud de la crisis.