La historia de Fernanda, una joven que acusó públicamente al director de su escuela, Luis N., de presunta agresión sexual, ha sacudido las redes sociales y desatado una ola de indignación. El caso se hizo viral tras el relato de la presunta víctima, quien detalló cómo el directivo se habría aprovechado de un trámite académico para retenerla y agredirla.
Fernanda denuncia al director de su escuela por presuntos abusos
Según el testimonio de la joven, se vio atrapada en un despacho, incapaz de abrir la puerta. El directivo, supuestamente, la sujetó con fuerza y comenzó a besarla. Mientras ella intentaba defenderse, él le expresaba sus intenciones, proponiéndole una relación, invitándola a comer y ofreciéndole llevarla a su casa. El testimonio de Fernanda provocó la inmediata reacción de la comunidad.
Familiares, amigos y estudiantes se congregaron a las puertas del centro educativo en señal de protesta. Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y la Policía Estatal de Investigación acudieron al lugar para iniciar las primeras indagaciones.
La comunidad se moviliza en apoyo a Fernanda
Otras estudiantes han compartido experiencias similares, sugiriendo que la agresión no es un hecho aislado. Una víctima narró las graves consecuencias que el incidente tuvo en su vida.
Diez años después de lo sucedido, recuerda cómo intentó hacer una denuncia, un proceso en el que tuvo el apoyo total de sus seres queridos. Sin embargo, el trauma no solo la afectó emocionalmente, sino que también le costó una oportunidad académica, pues perdió una beca que le permitiría estudiar en España.
La Fiscalía ha abierto expedientes por la presunta agresión sexual, pero aún no se han hecho arrestos en el caso
Como resultado de los recientes acontecimientos y de la presión social, se presentó una denuncia formal. La Unidad de Investigación Especializada en Delitos Sexuales de la Fiscalía General del Estado ha abierto dos expedientes, identificados con los folios 721 y 722 del año 2025.
No obstante, las autoridades de seguridad pública han confirmado que, hasta el momento, no se han efectuado arrestos relacionados con el caso. Conmovida y con un mensaje directo, Fernanda se dirige a las maestras, apelando a su conciencia, suplicándoles alzar la voz, que no se quedaran calladas y que no toleraran este tipo de conductas en sus escuelas. Su petición final fue clara: pide justicia, no solo por lo que ella vivió, sino por todas las mujeres que han sido víctimas de agresiones similares.