La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó que exista un desabasto de gasolina en el país, asegurando que cualquier problema con transportistas se está resolviendo. Sin embargo, la realidad en las calles del Valle de México refleja otra historia: estaciones sin combustible, largas filas y conductores que deben recorrer varias gasolineras antes de lograr llenar sus tanques.

Mientras el gobierno insiste en minimizar la situación, choferes de taxi, automovilistas particulares y conductores de plataforma comparten una misma experiencia: la falta de Magna y Premium es evidente en diferentes municipios de la Ciudad de México y el Estado de México.

Testimonios de la escasez en gasolineras

Un chofer de plataforma relató que, al intentar cargar gasolina en Lomas Verdes, le informaron que el combustible “se acabó y punto”. Otro conductor de taxi aseguró que, después de visitar tres estaciones distintas, no logró encontrar Magna y lleva casi una semana enfrentando el mismo problema.

Los despachadores de combustible también confirman la situación: en varias estaciones no hay Premium y en otras únicamente se ofrece Magna. En algunos casos, las gasolineras permanecen cerradas totalmente al no recibir pipas de abasto.

El golpe al bolsillo de los automovilistas

Los consumidores enfrentan un “viacrucis” que va más allá de las largas filas. Muchos automovilistas señalan que, ante la falta de Magna, no tienen otra opción más que pagar la Premium, lo que eleva de manera significativa el gasto para llenar el tanque.

En zonas como Ecatepec y Tecámac, la situación es todavía más complicada: hay estaciones cerradas por completo o con disponibilidad limitada, lo que genera un incremento en los costos de transporte y en la frustración de los usuarios.

Pemex asegura que el problema es temporal

De acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex), la falta de combustible responde a trabajos de mantenimiento en las unidades de transporte y a la escasez de autotanques disponibles para el reparto. La empresa aseguró que el desabasto será temporal, aunque no se ha dado una fecha clara para regularizar la distribución.

Una crisis que contradice al gobierno

Aunque las autoridades federales y la propia presidenta insisten en que “no hay desabasto”, las imágenes de estaciones cerradas, los testimonios de conductores y la falta de suministro contradicen la versión oficial. El desabasto de gasolina en el Valle de México se ha convertido en un problema real y tangible que impacta tanto la movilidad como la economía familiar.