El Instituto Nacional Electoral (INE) confirmó que otorgó un bono equivalente a dos meses de salario, que suma aproximadamente medio millón de pesos, a sus consejeros electorales como compensación por la labor desarrollada en la reciente elección del Poder Judicial.

Este bono ha generado diversas reacciones y debates en la opinión pública.

Historia y antecedentes del bono electoral

El “bono electoral” no es una práctica nueva, tiene una trayectoria que se remonta a los procesos electorales federales desde 1993. Incluso, en procesos recientes como la elección de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México (2020-2021) se otorgó un bono similar.

Sin embargo, en el caso específico de los consejeros electorales, el pago estuvo suspendido hasta 2012 y se retomó nuevamente en 2024 por la propuesta de la consejera Guadalupe Taddei Zavala.

Zavala defendió este incentivo señalando que es comparable con el aguinaldo y parte inherente de la historia y tradición del INE, indicando que “no hay por qué renunciar a él”.

Críticas y controversias en torno al bono del INE

Pese a su fundamento legal, el bono ha generado críticas por parte de algunos sectores sociales y medios de comunicación, principalmente debido a la percepción pública sobre los montos otorgados y el contexto económico del país.

Se cuestiona la conveniencia de pagar cerca de medio millón de pesos a consejeros electorales en tiempos que exigen austeridad y prioridades sociales. Sin embargo, el INE sostiene que este pago es un derecho que compensa tanto la suspensión de días de descanso como el esfuerzo extraordinario y la complejidad de organizar elecciones en un país tan grande.

Estructura institucional y alcance del bono de medio millón

Para dimensionar el impacto, es importante entender la estructura del INE. El Instituto cuenta con 11 consejeros electorales como cabeza del diseño y supervisión electoral, y un equipo de aproximadamente 20 mil colaboradores en diferentes niveles y funciones.

El bono no se limita a los consejeros, sino que abarca un amplio espectro de cargos, desde directores hasta personal operativo, con el objetivo de reconocer la labor adicional que implica un año electoral.