En medio de la tragedia y las cenizas que dejó el terrible accidente de la pipa en Iztapalapa, una pequeña luz de esperanza se aferra a la vida. Su nombre es Cerecito, el único cachorro vivo de Cereza, la valiente perrita french poodle que escapó con graves quemaduras del flamazo en el Puente de la Concordia. Hoy, su historia no solo conmueve a las redes sociales, sino que representa una increíble lucha por la supervivencia.

La historia de Cereza capturó los corazones de miles, pero es la imagen de su pequeño cachorro la que hoy renueva las fuerzas. A dos semanas del incidente, y tras la dolorosa pérdida de cuatro de sus bebés, la fundación que los cuida ha presentado oficialmente al pequeño guerrero.

VIDEO: Presentan a Cerecito, el milagro que le devuelve la esperanza a Cereza

La fundación “Huellitas, amor sin fronteras”, responsable del rescate y cuidado de ambos, ha mantenido informada a la comunidad sobre el delicado estado de salud de la perrita Cereza. Fue a través de sus redes sociales que compartieron el primer video de Cerecito, mostrando al mundo la razón por la que su madre sigue luchando.

En el emotivo clip, se puede ver al pequeño Cerecito, de apenas diez días, sano y creciendo junto a su madre. Su pelaje, blanco con manchas color café, recuerda mucho al de Cereza. Mientras él descansa, ella lo cuida con una ternura que desmiente el infierno que vivió.

“Hoy cumplo diez días en la veterinaria, diez días de lucha, de dolor. Desafortunadamente, he perdido a cuatro de mis bebés, y aunque mi alma llora, me aferro a lo único que me queda, mi pequeño cerecito, él es mi sol, mi razón de ser, mi esperanza”, se lee en la publicación que acompaña el video, narrando los sentimientos de la valiente madre.

¿Cuál es el estado de salud de Cereza tras el accidente en Iztapalapa?

La recuperación de Cereza ha sido un camino difícil. Según informa la fundación, la perrita ha sido sometida a tres cirugías para retirar el tejido quemado y evitar que la piel se necrose. Estas intervenciones son cruciales para darle una nueva oportunidad de sanar las graves heridas que sufrió durante el accidente de la pipa de gas LP.

A pesar del inmenso dolor físico y la pérdida de sus otros cachorros, la presencia de Cerecito ha sido su mayor motivación. Los veterinarios a cargo señalan que su instinto maternal se mantiene fuerte y que cuidar de su único hijo es una parte fundamental de su propia recuperación emocional y física.