La llegada del polvo del Sahara a México es un fenómeno meteorológico que ocurre cada año, especialmente en los meses de junio y julio, aunque las amenazas para la salud puede depender de sus concentraciones. Es importante conocer sus posibles efectos y tomar precauciones, especialmente si se tiene enfermedades respiratorias.
Estas partículas, transportadas por corrientes de aire desde el desierto africano, pueden generar molestias en la población sensible y alterar la calidad del aire en diversas regiones del país.
¿Cómo el polvo del Sahara puede afectar la salud?
Aunque el polvo del Sahara no representa un riesgo grave para la mayoría de la población, es importante seguir algunas recomendaciones para minimizar sus efectos en la salud, especialmente en personas con padecimientos respiratorios como asma, EPOC o alergias.
- Si tienes sensación de cuerpos extraños en los ojos, se debe de lavar la cara con abundante agua, preferentemente con agua potable o hervida.
- Las personas con enfermedades respiratorias crónicas, adultos mayores, mujeres embarazadas y niños se recomienda utilizar cubrebocas o un pañuelo de tela húmedo para cubrir nariz y boca.
- También se recomienda cubrir fuentes de agua como pozos, recipientes o estanques de almacenamiento para evitar el contacto con el polvo.
- Para barrer el piso de tu casa, se recomienda humedecer el piso para evitar levantar el polvo que pudiera acumularse en el suelo.
¿A qué estados llegará el polvo del Sahara?
Este fenómeno cruzará el Mar Caribe y afectará principalmente a tres estados de México, esto de acuerdo con la información del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala (INSIVUMEH).
- Campeche
- Quintana Roo
- Yucatán
Es importante destacar que la Sierra Madre Oriental funciona como una barrera natural que limita el avance del polvo del Sahara hacia el interior del país.
Gracias a esta cadena montañosa, solo una mínima cantidad de partículas logra superar esta región, lo que explica por qué su presencia en la Ciudad de México es casi nula.