En una votación histórica que ha dividido a la sociedad británica, la Cámara de los Comunes del Reino Unido aprobó en primera lectura un proyecto de ley que busca legalizar la muerte asistida para enfermos terminales en Inglaterra y Gales.
La propuesta, impulsada por la diputada laborista Kim Leadbeater, recibió 330 votos a favor y 275 en contra, en una jornada parlamentaria marcada por la emotividad y la reflexión ética.
Un camino hacia la “muerte digna”
El proyecto de ley “Assisted Dying Bill” permitiría a los adultos con enfermedades terminales y un pronóstico de vida de menos de seis meses solicitar asistencia médica para morir.
What a rally! We had a fantastic turn out for our Assisted Dying Rally today in Parliament Square, London.
— Humanists UK (@Humanists_UK) April 29, 2024
Our message?
It's about freedom of choice. It's about dignity, democracy, and acting for terminally ill and incurably suffering people. It's about compassion. Legalise… pic.twitter.com/GAlowPzT9L
Para acceder a esta opción, los pacientes deberán cumplir con rigurosos requisitos: ser mayores de 18 años, residentes en Inglaterra o Gales, tener capacidad mental para tomar la decisión y expresar su deseo de morir de forma “clara, firme, informada y libre de coerción”.
Dos médicos independientes y un juez del Tribunal Superior deberán evaluar cada solicitud, garantizando que se cumplan todas las condiciones.
Además, el proyecto de ley contempla penas de hasta 14 años de prisión para quienes intenten coaccionar, presionar o engañar a un paciente para que solicite la muerte asistida .
The UK parliament is considering a new bill to legalise assisted dying for terminally ill people in England and Wales.
— The BMJ (@bmj_latest) November 3, 2024
What is the state of assisted dying laws around the world?https://t.co/GOwr08Pn3c pic.twitter.com/VK2h0BQL2L
Azteca Noticias se comunicó con el Doctor Rodrigo Karlop Arce, medico epidemiólogo y docente investigador de la Universidad de Nueva York (NYU), especialista en salud publica e investigación, y aseveró:
“El debate de la muerte asistida ha sido sin duda una es una de las batallas que tenemos en la ética de atención médica alrededor del mundo”.
“Es sin duda una importante batalla cultural , pero también entrelazada con factores religiosos y de estados cada vez más agnósticos o separados de estos valores. Creemos que es importante la autonomía de las personas y su decisión de elegir en qué momento terminar sus vidas.
“Creo que especialmente y conforme avanzamos hacia una sociedad más abierta al pensamiento y basada en información, está claro que someter a una persona a una vida agobiante, llena de dolor y sufrimiento que corresponde a algunas patologías crónicas para las cuales no tenemos ningún tipo de cura o alivio, es sin duda una tortura infligida y apoyada por un régimen legal que no permite que estas personas puedan de manera autónoma decidir terminar en sus propias condiciones y bajo sus propios términos con su vida en este mundo”, señaló.
I welcome the Terminally Ill Adults End of Life bill passing its second reading.
— Alicia Kearns MP (@aliciakearns) November 29, 2024
Thank you to everyone who has reached out to me from both sides of the debate to share your own personal stories. I will do all I can to make this the very best possible legislation, with… pic.twitter.com/o1pNEUX98N
Voces a favor y en contra
El debate en la Cámara de los Comunes reflejó la complejidad del tema. Diputados de todos los partidos expresaron sus posturas, con argumentos que apelaban a la compasión, la autonomía individual, la ética médica y la protección de los más vulnerables.
“Esta ley trata sobre la compasión, la elección y el control”, declaró Kim Leadbeater, quien ha impulsado el proyecto de ley tras la muerte de su hermana, la diputada Jo Cox, asesinada en 2016.
“Se trata de permitir que las personas que sufren enfermedades terminales tengan la opción de morir con dignidad en sus propios términos”, agregó.
Por otro lado, diputados como el conservador Danny Kruger se opusieron firmemente al proyecto de ley, argumentando que “debilitaría las protecciones para las personas vulnerables y cambiaría la relación entre médicos y pacientes”.
Today marks the first time in history that the House of Commons has voted in favour of the principle of assisted dying for the terminally ill.
— Humanists UK (@Humanists_UK) November 29, 2024
During the debate, we rallied outside for compassion, dignity, and freedom of choice. Today marks a landmark moment for our campaign.… pic.twitter.com/7wYEMoGuLR
Un largo camino por recorrer
La aprobación en primera lectura es solo el inicio del proceso legislativo.
El proyecto de ley deberá ser examinado por un comité y luego debatido y votado en la Cámara de los Lores. De ser aprobado en ambas cámaras, se convertiría en ley.
Un debate que trasciende fronteras
El debate sobre la muerte asistida no es exclusivo del Reino Unido . Países como Canadá, Australia, Nueva Zelanda y España han legalizado la eutanasia o el suicidio asistido en los últimos años.
La decisión del Parlamento británico podría influir en otros países que buscan regular esta práctica.
Para el Doctor Rodrigo Arce, la autonomía de los pacientes es el camino que los países deben adoptar:
“Desde mi punto de vista como médico, como clínico especialista en salud pública, especialista en investigación, y fiel ferviente de la autonomía de los pacientes, y que a las comunidades es a las que hay que escuchar y no solamente a las estructuras preestablecidas que a veces definen nuestras vidas”.
“Creo que es algo que por lo menos hay que debatir, en la mayoría de los países, estamos en esa etapa y es importante el rol que algunos países insignia puedan tomar en esto, para poder levantar evidencia para que después pueda ser utilizada para apoyar o mejorar este tipo de intervenciones que permitan a los pacientes tener esa posibilidad de poder decidir sobre sus propias vidas”.