Papa Francisco en Ciudad Juárez: El día que visitó uno de los lugares más peligrosas de México
Era la primera vez que un jerarca católico visitaba aquella región del país. El papa Francisco, visitó a reos y se reunió con migrantes en Ciudad Juárez.
Fiel a su convicción migrante, el papa Francisco insistió en visitar la frontera de México con Estados Unidos, el muro que divide a dos países y el río compartido que ha sido la tragedia de cientos de familias en aquel lugar del Mundo: Ciudad Juárez, Chihuahua.
La visita a la frontera fue el miércoles 17 de febrero de 2016 y con ella selló su viaje apostólico a México. Aquel día, cargado de simbolismo y mensajes centrados en la migración, la justicia social y la reconciliación, marcó la vida de muchos mexicanos católicos de ambas naciones, acudieron miles a aquella misa binacional realizada en el lugar llamado “El Punto”.
Javier Calvillo, sacerdote y coordinador de la misa en “El Punto” recuerda con emoción aquella visita: “Cuando le presentan al papa toda la logística, todas las fronteras dice ‘quiero Ciudad Juárez’ y eso fue una bendición, algo muy especial.

Papa Francisco entra a peligrosa cárcel de Ciudad Juárez
El papa Francisco aterrizó en el Aeropuerto Internacional Abraham González, donde fue recibido cálidamente por los juarences, era la primera vez que un jerarca católico visitaba aquella región del país, atravesada por una triste crisis migratoria.
El Papa visitó el Centro de Readaptación Social No. 3, donde se reunió con internos y sus familias, en su discurso, enfatizó la importancia de la misericordia y la reinserción social, destacando que esta comienza en una sociedad que previene la exclusión.
Por primera vez un papa entraba a uno de los lugares más peligrosos de México, en donde fue recibido por los reclusos a quienes les dirigió palabras de consuelo y aliento:
“Estoy concluyendo mi visita a México, no quería irme sin venir a saludarlos, sin celebrar el jubileo de la misericordia con ustedes. Nos hemos olvidado de concentrarnos en lo que realmente debe ser nuestra verdadera preocupación; la vida de las personas, sus vidas, las de sus familias, las de aquellos que también han sufrido a causa de este circulo de violencia”.
Papa destaca sufrimiento de migrantes
Jorge Mario Bergoglio ofreció una misa multitudinaria en un área cercana a la frontera con Estados Unidos, donde se congregaron miles de personas de ambos lados. Sus discursos se enfocaron en la situación de los migrantes, con mensajes de solidaridad y llamados a la justicia.
El evento se realizó en un terreno que fue especialmente preparado para la ocasión, conocido como “El Punto”. Desde habló de la crisis humanitaria de la migración, destacando el sufrimiento de quienes se ven obligados a abandonar sus hogares y aprovechó para llamar a la conciencia global y a la necesidad de soluciones humanas y justas.
Y es que en 2016, México se enfrentó a una crisis migratoria caracterizada por un aumento significativo en el flujo de migrantes centroamericanos, especialmente provenientes de Guatemala, Honduras y El Salvador.
Aquel año, el Instituto Nacional de Inmigración (INM) interceptó a 188 mil 595 personas migrantes ese año, de las cuales 153 mil 641 provenían de Centroamérica. Situación que se vio agravada por las difíciles condiciones en los países de origen, incluyendo la violencia y la pobreza, lo que obligó a miles de personas a buscar refugio y oportunidades en otros países, incluyendo México.
La visita del Papa Francisco a Ciudad Juárez dejó una huella profunda en la región, reforzando mensajes de esperanza y solidaridad en una zona marcada por desafíos sociales.
El último lugar, el que siempre quiso conocer
El último evento del papa en la frontera, fue en un lugar que siempre quiso conocer. Javier Calvillo lo recuerda con emoción: “Fue al Cereso, Bachilleres, con el empresario, el seminario pero el siempre decía: ‘oye cuando vamos a empezar, quiero ver la frontera, el añoraba y lo podemos recalcar, él añoraba ver el muro, él siempre pedía el muro”.
Con estas palabras, el papa Francisco nombró a la migración: “Esta tragedia humana que representa la migración forzada hoy en día es un fenómeno global. Esta crisis que se puede medir en cifras nosotros queremos medirla por nombres, por historias, por familias”.
Más de 200 mil personas de México y Estados Unidos estuvieron en el lugar, separados por el muro y el río pero unidos en la Cruz del Migrante y por las palabras del santo pontífice.
Calvillo concluye que “su visita fue cien por ciento diciendo ‘mi identidad o mi historia es de migrante’, parece como si Dios nos mandara, el puente más grande, la luz más grande”.
Familia mexicana fabricó las sillas que usó en Ciudad Juárez
Una familia fronteriza elaboró todas las sillas que usó el jerarca católico a solicitud de El Vaticano y así lo recuerda Luz Rodríguez, de la Mueblería Colonial: “Hace 9 años ya de eso, bendiciones que nos han caído por ese trabajo que tuvimos muy importante para nosotros, la gente emocionada viniendo a ver la silla.. Fueron días emocionantes, sentimos mucho esta situación”.
