En Tabasco se tejió una red de complicidades de funcionarios de todos los niveles que le permitió al entonces secretario de Seguridad Pública, Hernán “N”, presuntamente operar el robo de combustible para su venta ilegal.

El grupo criminal denominado La Barredora tenía en sus filas a policías locales, pero también se sospecha de la relación de autoridades de las fiscalías General de la República y de Justicia estatal, así como de trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Exsecretario de Seguridad de Tabasco y el robo de combustible

Así lo alertó desde 2021 un reporte de inteligencia militar, que detallaba los vínculos del Hernán “N”, alias “Comandante H”, con servidores públicos para ganar millones de pesos con el huachicol.

En la estructura criminal que detectó el Ejército aparecían los presuntos responsables de la extracción de hidrocarburo, su almacenamiento, compra y venta ilegal. Fueron identificados como Adderly Michell Frías, Michell Alfonso Haddad, “El Joncha” y Gustavo Elías de Dios Yedra, “El Tavo”.

Todos ellos operaban en Cárdenas, Macuspana y Centro, Tabasco, y todos contaban con la complicidad de autoridades, según revela la investigación castrense.

Robo y trasiego de combustible en Tabasco

El agente ministerial Ángel Arceo Sevilla aparece como uno de los presuntos cómplices para el robo y trasiego del combustible, junto con “El Comandante Ceibas”, ambos de la Fiscalía General de la República.

En Villahermosa tenían el supuesto apoyo de Víctor Juárez, un funcionario de la Fiscalía de Justicia tabasqueña.

Desde el interior de Pemex contaban con un trabajador identificado como Jorge Carvallo, apodado “La Pizza”.
Hasta un marino está en la lista; solo se sabe que le decían “El Popeye”, adscrito al área de inteligencia naval.

El único que hoy finge demencia y asegura que nunca se enteró de esta red de complicidades para el negocio criminal fue el exgobernador de Tabasco, Adán Augusto López, quien puso al “Comandante H” al frente de la seguridad de la entidad. Hoy comanda las huestes morenistas en el Senado bajo el manto de la impunidad.