El calor y las altas temperaturas son molestos y peligrosos para las personas, pero para algunas razas de perro puede ser aún peor. Esto se debe a que muchos no tienen glándulas sudoríparas distribuidas por todo el cuerpo, por lo que regulan su temperatura principalmente jadeando y a través de las almohadillas de sus patas, un mecanismo menos eficiente para disiparlo.
Es importante tener en cuenta que algunos sufren más esta situación y necesitan cuidados especiales para mantenerse bien.
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Las razas de perro que sufren más el calor
Ya sea por sus hocicos cortos (braquicéfalos), pelajes densos o gran tamaño, estas razas requieren mayor atención durante las olas de calor. Según “Patas en casa”, estas son las 5 razas de perro más vulnerables al calor:
1. Bulldog (inglés y francés)
Tienen el hocico extremadamente corto, lo que dificulta la respiración y la disipación del calor. Los braquicefálicos tienen hasta 14 veces más riesgo de sufrir golpes de calor.
2. Husky Siberiano
Originario de climas fríos, su pelaje grueso y denso retiene mucho calor, lo que puede provocar sobrecalentamiento rápidamente
3. Pug
Suele tener dificultades respiratorias que elevan su temperatura corporal y aumentan el riesgo de golpes de calor.
4. Chow Chow
Tiene doble capa de pelaje diseñada para climas fríos, lo que lo hace muy vulnerable al calor extremo.
5. Terranova (o razas grandes con pelaje denso como Samoyedo y San Bernardo)
Su gran tamaño genera más calor corporal y su pelaje espeso está adaptado para frío, dificultando la regulación térmica en verano.
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¿Qué hacer para que un perro no sufra el calor?
Estos son algunos consejos importantes para asistir a los perros del calor de la mejor manera:
1. Mantenerlos hidratados: Siempre deben tener acceso a agua fresca y limpia.
2. Evitar las horas de más calor: Realizar ejercicio y paseos temprano en la mañana o al atardecer.
3. Protegerlos del sol: Proveerles un lugar fresco, ventilado y con sombra para descansar, tanto dentro como fuera de casa.
4. Refrescar su cuerpo: Mojarlos en la cabeza, cuello y tronco con agua fresca o usar paños húmedos para ayudar a bajar su temperatura corporal.
5. No dejarlos en autos: Nunca dejar a los perros dentro de vehículos, aunque las ventanas estén abiertas.
6. Jugar en el agua: Si al perro le gusta, permitirle nadar o jugar con aspersores para refrescarse de forma divertida y segura.
