Caminar en la capital a veces se siente como esquivar balas. Entre coches que no frenan, motos en las banquetas y semáforos que no hacen su chamba, hay zonas donde ser peatón es todo un deporte extremo. Y sí, hay una calle en particular que se ha ganado el título (nada honorable, por cierto) de la más peligrosa de toda la Ciudad de México (CDMX) para quienes andan a pie.
¿Cuál es la calle más peligrosa de la CDMX para caminar?
No lo decimos por exagerar ni por alimentar el drama. Según datos del Mapa Interactivo de Hechos de Tránsito de la Secretaría de Movilidad (SEMOVI), la Calzada de Tlalpan es el punto rojo por excelencia.
Atraviesa media ciudad desde el sur y, aunque es clave para el transporte y conecta con muchas zonas importantes, también es donde más reportes hay de atropellamientos.
En tramos como el que va de Taxqueña a Chabacano, cruzar puede sentirse como un acto de fe. Los coches no respetan los altos, los semáforos duran un suspiro y la gente, a veces, ya ni espera: corre. Literalmente corre.
¿Por qué Calzada de Tlalpan es tan peligrosa para los peatones?
Hay varios factores que la hacen un caos. Primero: pasa de todo por ahí. Metro, Metrobús, camiones, combis, motos, bicis… y peatones. Segundo: muchas de las banquetas están rotas, los cruces no están bien señalizados y hay zonas sin puente peatonal. O sea, la gente cruza donde puede, no donde debería.
Y aunque ya se han prometido mejoras (sí, como cada año), las cifras siguen igual o peor. El problema es estructural: es una vía pensada para automóviles, no para personas. Y quienes caminamos por ahí lo sabemos (y lo sufrimos) a diario.
¿Qué se puede hacer si toca pasar por ahí?
No hay fórmula mágica, pero hay tips que ayudan. Lo más importante: cruzar por donde toca, aunque parezca más tardado o nadie más lo haga. Los pasos elevados son tus aliados, aunque a veces estén lejos o feos. También vale oro estar bien alerta, sin audífonos ni celular en la mano. Tlalpan no perdona distracciones.
Y si es de noche o vas solo o sola, mucho ojo: busca caminar por zonas con luz y movimiento, aunque implique rodear un poco. La Calzada puede ser funcional, pero también es un punto caliente para el caos vial… y hay que moverse con cautela.