Las lluvias que han marcado gran parte de 2025 podrían no terminar pronto. De hecho, podrían extenderse hasta febrero de 2026, advirtió Víctor Manuel Torres Puente, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC) de la UNAM.

Según el especialista, no se trata de una simple predicción, sino de una analogía con lo que ocurrió en 2009, cuando las condiciones oceánicas eran muy parecidas. En ese entonces, las precipitaciones se mantuvieron hasta febrero de 2010.

“Las señales actuales son casi idénticas: el Pacífico está en una fase negativa de la Oscilación Decadal y el Atlántico en una fase positiva. Esto genera un calentamiento anómalo en ambas regiones que favorece lluvias prolongadas”, explicó Torres.

Lluvias más intensas y ciclones más activos en México

El investigador señaló que esta coincidencia de fenómenos no es común y suele presentarse cada 15 a 30 años. Sin embargo, el calentamiento global podría estar acortando esos ciclos, haciendo que este tipo de condiciones se repitan con mayor frecuencia.

“Estamos viviendo una combinación poco usual que calienta más el Pacífico mexicano, lo que provoca tormentas y ciclones más fuertes”, advirtió.

De hecho, casi el 98% de las tormentas tropicales de esta temporada se han formado en el Pacífico, mientras que el Atlántico ha permanecido relativamente tranquilo.

Las lluvias, indicó, seguirán dependiendo de cómo interactúan los frentes fríos con la humedad del océano. Si ambos sistemas se mantienen activos, los aguaceros podrían continuar durante los primeros meses de 2026.

Entre la prevención y el cambio climático

Torres Puente destacó que, aunque las lluvias han ayudado a recuperar los niveles de las presas, también representan un riesgo. Actualmente, algunas están al 95% de su capacidad, lo que podría generar desbordamientos si las precipitaciones no ceden.

Iundación en Álamo, Veracruz
Lluvias en Álamo, Veracruz dejan severas afectaciones|Reuters

El experto aclaró que aún no se puede afirmar que el cambio climático sea la causa directa de este comportamiento, pero sí se da dentro de un contexto global más cálido.

“El sistema atmosférico no muestra señales de estabilización; sigue calentándose. Si no cambiamos nuestro comportamiento como sociedad, la tendencia continuará por al menos un siglo más”, advirtió.

La UNAM llama a prepararse ante lluvias prolongadas

Que no digan que no se aviso con tiempo para prevenir desastres como los ocurridos en Veracruz, Hidalgo y Querétaro. Desde la UNAM, el llamado es claro: reforzar la investigación meteorológica, coordinar esfuerzos entre instituciones y fomentar la cultura de prevención.

“El reto no es alarmar, sino anticiparse. La atmósfera tiene memoria, y si aprendemos a leerla, podremos prepararnos mejor ante los escenarios que vienen”, concluyó el académico.

Con la posibilidad de que las lluvias se mantengan hasta febrero de 2026, México debe estar listo para enfrentar un invierno húmedo y con riesgos de desbordamientos en distintas regiones del país.