Habitantes de San Agustinillo, Oaxaca, inspeccionan los destrozos tras el impacto del huracán "Erick"

El huracán “Erick” dejó huellas devastadoras en San Agustinillo, Oaxaca, obligando a los habitantes a evaluar la magnitud de los daños el pasado fin de semana.

Por: Ollinka Méndez

×

1 de 6

El horizonte de San Agustinillo: Una imagen que contrasta la belleza del Pacífico con los signos visibles de la devastación dejada por “Erick”. | Reuters

Una perspectiva única desde el cielo: Nuestro dron capta la magnitud de los negocios dañados a lo largo de la costa de San Agustinillo, Oaxaca. | Reuters

La fuerza de la naturaleza: Una palmera monumental yace derribada en la costa de San Agustinillo, testimonio mudo del poder del huracán “Erick”. La imagen captura la cruda realidad del impacto en el paisaje. | Reuters

A pesar de la tormenta, el espíritu de San Agustinillo no se quiebra. | Reuters

Tras el impacto de “Erick”, la gente empieza a levantar escombros y a planear la reconstrucción de sus espacios en la playa. | Reuters

Impresionante vista aérea del amanecer en San Agustinillo, Oaxaca, donde la comunidad ya evalúa los destrozos que dejó el huracán “Erick” en la costa.
| Reuters


El paso del huracán “Erick” en Oaxaca ha dejado estragos, desde pescadores desaparecidos hasta la vida de un bebé. En la zona de San Agustinillo, los habitantes también sufren las consecuencias de este fenómeno. Algunos perdieron sus casas y negocios. Hoy tienen la esperanza de que paso a paso todo regrese a la “normalidad”.

El impacto de “Erick” en Oaxaca: Hay comunidades sin luz

El huracán “Erick”, que tocó tierra en Oaxaca con una poderosa categoría 3, ha dejado a su paso una estela de devastación que va más allá de los centros urbanos. En comunidades costeras más alejadas, donde la electricidad no ha sido restaurada y la población carece incluso de alimentos básicos, la situación es crítica.

En Playa Banco de Oro, por ejemplo, los residentes afirman que “el pueblo desapareció", un reflejo de la magnitud de los daños. Las viviendas quedaron sin puertas ni techos, mostrando la furia del fenómeno natural.

Lilia Castellano Rodríguez, habitante de Playa Banco de Oro, compartió el desolador panorama: “Ya no es el mismo” su pueblo. Confirmó que casi todas las casas sufrieron afectaciones severas, con estructuras derrumbadas y techos volados. La situación se agrava por las lluvias ininterrumpidas, que han dejado a niños y animales completamente empapados. En cuanto a la alimentación, Lilia relató que no tienen ni siquiera maíz para elaborar tortillas y subsisten con una pequeña despensa de arroz que recibieron el día anterior, racionándola para que alcance para todos, incluyendo sus hijos. Estima que en la comunidad habitan alrededor de 30 a 35 familias.

Pinotepa Nacional evalúa daños tras el paso de “Erick”

Pinotepa Nacional, Oaxaca, amanece hoy con un panorama distinto. La lluvia ha cesado, pero las imágenes que se revelan muestran la magnitud de los estragos dejados por el huracán “Erick”. La fuerza del viento, que acompañó al fenómeno, causó daños considerables, evidenciados en múltiples puntos de la ciudad.

Las autoridades han reportado un saldo blanco en cuanto a vidas humanas se refiere, lo cual es una noticia positiva en medio de la devastación. Sin embargo, los daños materiales son cuantiosos y se extienden por diversas áreas.

En la zona céntrica, por ejemplo, ya se ha restablecido el suministro de energía eléctrica, brindando un respiro a algunos residentes. No obstante, numerosas colonias en las periferias y las agencias, que son comunidades más alejadas de la cabecera municipal, permanecen sin luz, sumando un desafío adicional a la recuperación.

Entre las afectaciones más visibles se encuentran dos gasolineras que resultaron dañadas. Pero el impacto más desolador es el que sufrieron decenas de viviendas, cuyos techos fueron arrancados por los vientos huracanados.

Esto obligó a muchas familias, incluso con niños pequeños, a pasar la noche a la intemperie, enfrentando el calor y los mosquitos, una dura realidad común tras el paso de un huracán. Los reportes de los habitantes son constantes, quienes piden que se visiten las colonias y comunidades más afectadas, especialmente aquellas donde las viviendas, construidas con materiales vulnerables como lámina, perdieron sus techos.

Otras Noticias

×
Inklusion
Loading