La ciudad estadunidense de Los Ángeles, en California, se declaró de manera oficial “ciudad santuario” para inmigrantes indocumentados, con lo que se evitará que las autoridades locales colaboren con las federales en tareas migratorias.
El Concejo de la ciudad aprobó de manera unánime, con 12 votos, una iniciativa presentada por el concejal Gilbert Cedillo y respaldada por el presidente del organismo, Herb Wesson, informó la cadena Telemundo.
“Declaramos para todos aquellos que están en esta ciudad, en este día y en esta hora, que Los Ángeles es una ‘ciudad santuario’”, enfatizó Cedillo al presentar su moción ante el Concejo.
La resolución establece que a partir de ahora, los residentes de Los Ángeles serán “juzgados por sus contribuciones a la ciudad o su compromiso con su familia, y no por el lugar de donde provienen o por el color de su piel”.
Con esta medida, se formalizan prácticas ya establecidas en Los Ángeles, donde la policía evita ejercer controles de inmigración y restringe su ayuda a las autoridades migratorias federales.
La ciudad de Los Ángeles tenía en 2017 una población de cerca de cuatro millones de habitantes, de los cuales 48.7 por ciento eran residentes hispanos, según el censo de población.
Ciudades de California como Los Ángeles, San José, San Francisco y Santa Ana, así como Chicago, Nueva York y Washington, son “ciudades santuario”, que limitan su cooperación con los esfuerzos del gobierno federal para hacer cumplir leyes migratorias.