En Corea del Sur, la presentación de los resultados de las elecciones se ha elevado a la categoría de un auténtico espectáculo visual y narrativo, donde la Inteligencia Artificial (IA) y las animaciones de vanguardia convierten a los candidatos en protagonistas de situaciones tan extravagantes.
Esta singular tradición, que ya cumple una década, busca no solo informar, sino también cautivar a una audiencia cada vez más amplia, con un foco especial al electorado joven.
La política como superproducción
Desde hace diez años en Corea del Sur, las principales cadenas de televisión surcoreanas han hecho de la innovación tecnológica su “emblema” durante la cobertura electoral.
La práctica consiste en transformar a los políticos en personajes de animación gracias a sofisticados algoritmos de Inteligencia Artificial y gráficos por computadora.
28년 만에 최고 투표율…"보수·진보, 다른 이유로 결집" #SBS뉴스 https://t.co/aJyYTV03Sj
— SBS 뉴스 (@SBS8news) June 4, 2025
En las más recientes elecciones presidenciales, la cadena SBS llevó esta apuesta al extremo, sorprendiendo a los espectadores con representaciones de los candidatos inmersos en escenas inspiradas en películas de culto como Mad Max o compitiendo en alocadas carreras al estilo del videojuego Mario Kart.
No faltaron tampoco persecuciones postapocalípticas, reñidos partidos de hockey sobre hielo e incluso complejas coreografías de baile, todo generado digitalmente.
Una década de “disfraces digitales” para conectar con el electorado
Lo que hoy es una esperada tradición comenzó hace una década como una estrategia audaz para hacer la política más digerible y atractiva, especialmente para las generaciones más jóvenes, a menudo percibidas como distantes o desinteresadas del proceso democrático.

Estos “disfraces digitales” y las creativas puestas en escena buscan humanizar a los contendientes, despojándolos de su formalidad habitual y presentando el complejo entramado electoral de una forma más comprensible y, sobre todo, memorable.
La intención es clara: simplificar sin banalizar, entretener sin desinformar.

Entre el entretenimiento y la seriedad democrática
Algunos críticos argumentan que tal despliegue de parafernalia visual podría trivializar la seriedad inherente al proceso democrático, reduciendo la política a un mero producto de consumo efectista.
Sin embargo, una parte considerable de la sociedad surcoreana, y numerosos analistas de medios, ven en esta práctica una forma innovadora y efectiva de modernizar la comunicación política y hacerla genuinamente más accesible.
La combinación de información precisa, presentada de manera rigurosa en sus datos esenciales, con un envoltorio de entretenimiento de alta calidad, ha demostrado ser una herramienta potente para involucrar a una audiencia diversa y fomentar un mayor interés cívico.
¿México estará preparada para esta forma diferente de comunicar?