Un deslave en el kilómetro 78 de la carretera Transpeninsular, en el municipio de Mulegé, por poco provoca una tragedia en la zona norte de Baja California Sur. La creciente del río San Ignacio provocó que una pipa que transportaba gas LP quedara colgando sobre la vialidad, generando miedo entre los habitantes por el riesgo que representa este tipo de material.
El incidente no solo interrumpió el tránsito vehicular, también obligó a las autoridades estatales y federales a tomar medidas rápidas para evitar una tragedia mayor.
Habilitan ruta alterna en San Ignacio, Baja California Sur
El secretario General de Gobierno, Saúl González Núñez, recorrió la zona acompañado de elementos de los tres niveles de gobierno, donde supervisó las maniobras y el restablecimiento provisional de la movilidad.
Desde temprana hora, la Secretaría de Planeación Urbana, Infraestructura y Movilidad (SEPUIMM) habilitó un camino alterno para garantizar el acceso a la comunidad de San Ignacio. Con ello, los habitantes pueden trasladarse sin quedar incomunicados mientras continúan los trabajos en la carretera principal.
Seguridad ante todo en el retiro de la pipa en San Ignacio
La empresa propietaria de la unidad trabaja en coordinación con Protección Civil para retirar la pipa de gas bajo estrictos protocolos de seguridad. El objetivo es minimizar riesgos y proteger tanto a los pobladores como a los cuerpos de emergencia que participan en las labores.
Se pidió a la ciudadanía no circular por el tramo afectado, y en caso de ser necesario, hacerlo con extrema precaución debido a la inestabilidad del terreno.
Apoyo a familias afectadas en San Ignacio
Además del operativo en carretera, elementos de la Subsecretaría de Protección Civil, la Policía Estatal y la Administración Portuaria Integral entregaron insumos básicos a las familias de San Ignacio que resultaron damnificadas por las lluvias torrenciales de la noche del pasado domingo y lunes.
Durante la noche, brigadas acudieron casa por casa para entregar agua, alimentos y artículos de primera necesidad, informó el gobierno de Baja California Sur.