Carlos Villagrán no necesita presentación. Basta con escuchar un “¡Cállate, cállate, cállate que me desesperas!” para saber que estamos hablando de Kiko, uno de los personajes más entrañables —y berrinchudos— de la televisión latinoamericana.
Pero detrás de los cachetes inflados y el uniforme de marinero hay una historia que va mucho más allá del patio de la vecindad: una historia de fama, controversias… y una fortuna millonaria.
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¿Cuánto dinero tiene hoy Carlos Villagrán?
Según el sitio Celebrity Net Worth, la fortuna de Villagrán ronda los 10 millones de dólares. Así es: cerca de 199 millones de pesos mexicanos acumulados a lo largo de décadas de carrera.
Y aunque su paso por la televisión nacional fue breve comparado con otros actores, el personaje de Kiko cruzó fronteras y lo mantuvo vigente por años, sobre todo en países como Venezuela, Argentina o Brasil.
Eso sin contar los ingresos por giras, espectáculos en vivo y hasta saludos personalizados en plataformas digitales. Kiko, literalmente, sigue trabajando por él.
¿Sigue en activo Carlos Villagrán a los 80 años?
Sí, y con toda la energía del mundo. Villagrán ha dejado claro que no piensa colgar el traje de Kiko. Ha participado en circos, shows especiales y sigue apareciendo en redes sociales como si el tiempo no hubiera pasado.
En 2022, incluso presumió su nuevo auto personalizado: un Mini Cooper rojo con detalles de su personaje, al que bautizó como “Kikokar”.
La foto la acompañó con un mensaje simple pero lleno de nostalgia: “Sean felices”. Y la publicación, claro, se volvió viral.
Carlos Villagrán, “Kiko”, tiene polémica reacción a la serie de “Chespirito”
No todo fue risas. A finales de los 70, la relación entre Villagrán y Roberto Gómez Bolaños se rompió. Según contó él mismo, fue vetado luego de rechazar una oferta que implicaba seguir bajo el control creativo de Chespirito.
La historia es conocida: el “no” lo sacó del aire, pero lo llevó a otros países donde su personaje siguió triunfando.
Hoy, lejos de los conflictos del pasado, Villagrán sigue siendo una figura querida por generaciones. Su historia no solo es la de un actor que hizo reír a millones, sino la de alguien que, a pesar de todo, supo mantenerse vigente sin soltar al personaje que lo marcó para siempre.