Últimamente, los exorcismos no solo aparecen en las pantallas y novelas, sino que ha tomado importancia dentro de la conversación nacional, pues recientemente, se dio a conocer por parte de la Asociación Internacional de Exorcistas (AIE), la única asociación reconocida por la Santa Sede, un reporte en el que señalo tener 905 miembros en noviembre de 2023. No obstante, el miedo ha comenzado a crecer debido al creciente miedo de ser “poseído”.
¿Qué dice el Vaticano sobre los exorcismos en México?
Aunque el Vaticano sí ha confirmado que la posesión demoníaca y la práctica del exorcismo existe y son reconocidos por la iglesia católica, también advierte que requiere de la aprobación del obispo, la evaluación médica y psicológica del paciente para descartar causas naturales, y se basa en un rito oficial y una guía específica para realizarlo.
Además, cabe mencionar que hasta el año 2023, la Asociación Internacional de Exorcistas (AIE), la única asociación reconocida por la Santa Sede, reportó tener 905 miembros, mientras que, en 2021, solo contaba con 50, lo que refleja un aumento en el interés de instruirse sobre este tema.

Los exorcismos y la cultura mediática
Aunque las cifras sobre los exorcismos en México no son claras, se ha señalado que son miles los casos que se han reportado, no existe un consenso sobre que puede ocasionar que se focalicen en diferentes estados, pues pueden llegar a incurrir aspectos cómo la fe, los factores sociales, culturales e incluso psicológicos,
Si a esto se le suma el poder que ejercen medios como el cine y la literatura dentro de la construcción del imaginario colectivo, gracias a títulos clásicos del cine como: El Exorcista (1973), El Exorcismo de Emily Rose (2005), El Rito (2011), o El exorcismo de Dios (2021), o de la literatura con clásicos como, Tiembla el Exorcismo de José Forte o el Libro de los muertos. Esto puede tener un trasfondo más interesante.
Para diversos psicólogos, es esta influencia cultural la que puede generar una suerte de contagio social, donde pueden influir aspectos como la sugestión y el medio, aspectos que pueden complicar la veracidad de los reportes.
Así, la frontera entre la realidad espiritual y la percepción psicológica se vuelve más difusa y compleja. Lo cierto es que el exorcismo ha dejado de ser un ritual aislado y hoy forma parte de un debate global que mezcla religión, ciencia y cultura popular.