Al estar en una relación de cualquier tipo es importante considerar las emociones y tener percepción de que una acción repercute en el otro, mejor conocido como responsabilidad afectiva. Sin embargo, muchas personas no saben qué es. Ante esto, la Universidad Nacional Autónoma de México lo responde y además explica cómo lograr tener responsabilidad afectiva.
La académica de la Facultad de Psicología de la UNAM Mariana Gutiérrez Lara explica que el término responsabilidad afectiva está orientado a la percepción que tienes o que puedes llegar a tener en relación al impacto que tienen tus palabras y tus actos en el otro; o sea, que lo que una persona dice y hace tiene una consecuencia en las emociones de la otra persona.
¿Cómo lograr tener responsabilidad afectiva?
La especialista refiere que, para lograr tener responsabilidad afectiva es importante aprenderla, desarrollarla e incluso mejorarla a través del tiempo y las experiencias. Hacerse conscientes de los sentimientos y tomar en cuenta los de la otra persona como una muestra de inteligencia emocional.
En ese sentido, explica que algunos de los puntos para poder desarrollar responsabilidad afectiva son:
- Es importante conocerse, reflexionar cómo estoy y en qué momento de mi vida me encuentro, definir qué quiero, para qué lo quiero y cómo lo quiero.
- Vincularse con el otro para crecer juntos, para complementarse y considerar los vacíos de la otra persona o los míos.
- Aprender a escucharse, observarse y dialogar.
- Tener tolerancia a la frustración y entender que las cosas no salen muchas veces como se esperan.
- Estar al pendiente de la salud mental, pues muchas veces se está en una zona de confor por miedo a moverse de ella.
- Tener amor propio.
Asimismo, la especialista explica que para tener responsabilidad afectiva es importante tomar en cuenta los siguientes aspectos:
- Respeto a la otra persona, pero también a uno mismo. Es necesario saber si las necesidades de ambos individuos se están cumpliendo.
- Honestidad en ambas partes y revisar si lo que se necesita existe en la relación.
- Reciprocidad.
- Diálogo entre ambas personas, pues una buena relación necesita comunicación y escucha.
- Saber decir adiós, en ocasiones es lo más sano y beneficioso.
Por último, la docente reitera que en el amor es necesario ser reponsable afectivamente y no sentirse frustrado ni quedarse con una situación que no es positiva para ninguna de las dos partes en la relación.