La historia de Sofía, la niña de 13 años que podría perder su pierna tras una bala perdida en Azcapotzalco
El caso de Sofía es un reflejo de la vulnerabilidad de miles de familias mexicanas ante la violencia armada, pues podría perder la pierna tras recibir una bala perdida.
A sus apenas 13 años, Sofía ha enfrentado más adversidades que muchas personas en toda una vida. Hace cuatro años fue diagnosticada con diabetes, una enfermedad crónica que requiere cuidados constantes. Hace apenas un mes, su mundo volvió a sacudirse tras la trágica muerte de su padre en un accidente carretero. Sin embargo, el destino le tenía preparado otro golpe: el pasado viernes, a las puertas de su casa en la alcaldía Azcapotzalco, una bala perdida impactó su pierna, poniendo en riesgo su extremidad y su futuro.
Sofía tiene 13 años y una bala perdida la alcanzó afuera de su casa. 💔😔
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) June 12, 2025
Hoy está a punto de perder la pierna en el Hospital Magdalena de las Salinas.
Su madre suplica: “Solo quiero que la salven. Es una niña, no merece esto.”
La información la tiene @laucasillas pic.twitter.com/eynj0mGbf9
¿Qué le ocurrió a Sofía, la niña de 13 años que podría perder la pierna por una bala perdida?
La tarde del incidente, una balacera sacudió la tranquilidad de la colonia. Sofía se encontraba en la entrada de su hogar cuando fue alcanzada por un disparo. Su madre, Jaquelin, recuerda con angustia el momento:
“Cuando vi a mi hija parada, sin moverse. Entonces lo que hice fue aventarla al piso. Pero ella no sentía la pierna. Cuando la volteé, ya estaba desangrándose”.
En el mismo ataque, Jaquelin resultó herida por dos balas que rozaron su abdomen y pantorrilla. Su hijo menor, de apenas cinco años, resultó ileso, mientras que su cuñado recibió dos impactos de arma de fuego. Sofía, sin embargo, fue quien llevó la peor parte: la bala dañó gravemente su pierna y los médicos han advertido sobre la posibilidad de amputación.
Su madre denuncia carencias en la atención médica de Sofía
La familia trasladó de inmediato a Sofía al Hospital Magdalena de las Salinas, donde, según denuncia su madre, no recibieron atención inmediata. Jaquelin asegura que el caso comenzó a recibir atención solo después de viralizarse en redes sociales:
“No hubo atención oportuna. Detecté que comenzaron a ponerle un poco de cuidado porque su caso ha comenzado a viralizarse”.
El miedo de Jaquelin crece al escuchar historias de otros pacientes que han perdido extremidades en situaciones similares, lo que la lleva a hacer un llamado desesperado: “Que agoten hasta lo último... No quiero que le amputen la pierna”.
La familia de Sofía no tiene vínculos con la delincuencia; son víctimas colaterales de la violencia que azota la CDMX y de un sistema de salud desgastado y sin recursos suficientes. La madre enfatiza: “Ellos no son delincuentes... solo dobles víctimas de un sistema de salud ausente y de una ciudad donde sicarios actúan sin remordimiento, sin importar los daños colaterales”.