La mañana de este martes fue detenido Luis Rey García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana A.C., una organización no gubernamental pro migrante que opera en el sur de México. La aprehensión ocurrió en las inmediaciones del parque Bicentenario, en Tapachula, Chiapas, minutos después de que el organizador ofreciera una conferencia de prensa donde anunciaba la salida de una nueva caravana migrante de al menos 2 mil personas rumbo al norte del país.

De acuerdo con el Registro Nacional de Detenciones, García Villagrán fue detenido desde las 10 de la mañana, aunque se confirmó públicamente pasado el mediodía. Actualmente, se encuentra a disposición del Ministerio Público Federal en el Centro de Justicia Penal Federal en Tapachula.

Sin cargos claros; organizaciones denuncian criminalización contra Luis Rey García Villagrán

Hasta el momento, no se han dado a conocer los delitos por los cuales fue detenido el activista, lo que ha provocado indignación entre diversas organizaciones defensoras de derechos humanos.

Colectivos y ONGs consideran que esta detención es una forma de criminalizar la labor humanitaria y la defensa de los derechos de las personas migrantes, sobre todo porque la aprehensión ocurrió justo antes de la salida prevista de una caravana migrante con rumbo al norte del país.

Luis Rey García Villagrán es uno de los rostros más visibles de los movimientos migrantes en México. En los últimos años ha encabezado múltiples movilizaciones y ha denunciado los abusos que enfrentan los migrantes en su paso por territorio nacional.

Crece tensión en la frontera sur


La caravana que se planeaba salir desde Tapachula este miércoles se mantenía en expectativa ante la ausencia de su organizador principal. Se estima que unas 2 mil personas migrantes, muchas de ellas provenientes de Centroamérica, Haití y Sudamérica, se congregaban para avanzar hacia el centro del país con la intención de regularizar su situación migratoria o continuar su ruta hacia Estados Unidos.

Esta detención se suma a la creciente tensión entre organizaciones civiles y autoridades migratorias, en un contexto donde el control migratorio se ha endurecido en la frontera sur mexicana.