Un objeto interestelar identificado como “31/ATLAS” ha encendido una ola de teorías y especulaciones: ¿podría ser simplemente un cometa antiguo, o en realidad una nave extraterrestre en misión secreta? Desde su descubrimiento el 1 de julio de 2025 por el telescopio ATLAS en Chile, este visitante pasó de ser catalogado como un cometa al centro de debates sobre inteligencia alienígena, gracias, entre otros, al astrónomo Avi Loeb y su equipo.
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Misterio interstelar: ¿qué dice la NASA sobre 31/ATLAS?
La NASA confirma que 3I/ATLAS es el tercer objeto interestelar jamás detectado, tras ʻOumuamua (2017) y Borisov (2019), y lo considera un cometa natural con una tenue coma y cola. Según registros del Minor Planet Center, su órbita es hiperbólica, lo que indica que proviene de fuera del sistema solar y no representa ningún peligro para la Tierra: pasará a unas 1.6‑1.8 unidades astronómicas del Sol en octubre‑noviembre de 2025 y luego continuará su viaje hacia el espacio profundo.
Teorías intrigantes: ¿una sonda alienígena disfrazada?
El astrofísico Avi Loeb, junto a Adam Hibberd y Adam Crowl, ha propuesto que ciertas anomalías podrían apuntar hacia una intención artificial tras 31/ATLAS. Alegan que exhibe aceleración no gravitacional sin evidencia clara de outgassing, y que su trayectoria retrógrada le habría permitido sobrevolar Venus, Marte y Júpiter de manera improbable para un cuerpo natural.
Estas y otras características llevan a algunos a especular que podría tratarse de una sonda extraterrestre con intenciones benignas o quizás hostiles, en línea con la teoría del “Bosque Oscuro” popularizada en la novela “El problema de los tres cuerpos”.
No obstante, la mayoría de los expertos y la propia NASA consideran esta opción altamente especulativa y le dan más peso a una explicación natural y científica
Mientras lo observen desde observatorios profesionales y aficionados en el último trimestre de 2025, 31/ATLAS seguirá teniendo el estatus de cometa interestelar. Pero el eco de la hipótesis de una nave extraterrestre persiste: una pequeña chispa de misterio en el vasto cosmos, lista para encender debates sobre si no estamos solos. La historia de 31/ATLAS reactiva preguntas ancestrales: ¿es ciencia o ciencia‑ficción? Solo el tiempo y la observación lo dirán.