Luego de una demanda presentada por defensores de los derechos de los inmigrantes y el gobierno federal, la Corte Suprema suspendió en Texas la ley SB4, que permite penalizar los ingresos ilegales al estado norteamericano y se conviertan en un delito estatal. De esta manera, la norma, que fue sancionada en febrero, no entrará en vigencia tras el bloqueo judicial.
Obstáculos para llegar a la frontera: Así es como intentan cruzar los migrantes a Estados Unidos
Esta nueva reglamentación, que además le otorgará poder a la policía local de interrogar y arrestar a cualquier persona que se crea que ingresó de manera indebida al país, fue cuestionada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien solicitó al Tribunal la interrupción inmediata de su efectividad.
Por su parte, el gobernador de Texas Greg Abbott se pronunció sobre este fallo: “La Corte Suprema ha frenado temporalmente la aplicación de la SB4, pero no detuvo la autoridad ya existente para arrestar por invasión criminal y otras violaciones de la ley. Texas continuará utilizando todas las herramientas y estrategias para responder a esta crisis fronteriza creada por Biden”.
Te puede interesar: Así sería la cárcel para los migrantes que no cumplan con la ley SB4 en Texas
¿Hasta cuándo duraría esta suspensión?
La administración del mandatario de EU argumentó que la entrada en vigencia de esta norma “usurparía la autoridad federal central en materia de inmigración y dañaría las relaciones internacionales”. Desde la Corte Suprema, acompañaron esta medida y el veredicto fue contundente: el estado no podrá poner en práctica esta ley hasta que se modifiquen ciertas cláusulas, aunque no hay un plazo específico establecido.
Te puede interesar: La Corte Suprema tiene en la mira una ley de Texas y Florida
En tanto, los organismos de protección aseguran que la SB4 también podría causar la creación de “perfiles raciales por parte de la policía”, y algunos funcionarios del estado argumentaron que el distrito “debe intervenir porque el gobierno federal no está haciendo lo suficiente para detener la inmigración ilegal”.
Sin embargo, otros gobernadores republicanos respaldan la decisión de Abbott, y explicaron que el Gobierno “no está haciendo lo suficiente” para hacer cumplir las leyes de inmigración existentes.
