El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) llevó a cabo un importante operativo en el condado de Palm Beach, Florida, los días 27 y 28 de enero. Como resultado, fueron detenidos 32 inmigrantes indocumentados con antecedentes penales y ahora se encuentran bajo custodia a la espera de su deportación.
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Los detenidos, todos latinoamericanos, provienen de México, Guatemala, Haití, Honduras, El Salvador, Venezuela, Colombia, Brasil, Cuba y Nicaragua. Sus antecedentes incluyen delitos como posesión de drogas, prostitución, fraude, reingreso ilegal, resistencia a la autoridad, robo, violación de libertad condicional y conducción bajo los efectos del alcohol.
Aumento de operativos migratorios en Florida
El operativo fue realizado en conjunto con la Patrulla Fronteriza y se enfocó en la detención de personas con historial criminal. El ICE destacó algunos casos específicos, como el de un venezolano de 30 años con condenas por resistencia a la autoridad, posesión de drogas y robo; una haitiana de 44 con antecedentes por agresión, posesión de drogas y prostitución; un cubano de 24 culpable de fraude y hurto; y un guatemalteco de 25 años arrestado previamente por reingreso ilegal y posesión de cocaína.
El gobierno de Donald Trump inició con las deportaciones masivas de migrantes
Este aumento en los operativos ocurre en un contexto de endurecimiento de la política migratoria bajo la nueva administración de Donald Trump. Recientemente, se anunciaron nuevas órdenes ejecutivas para reforzar la aplicación de las leyes migratorias y la eliminación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para unos 300,000 venezolanos, lo que los dejará en riesgo de deportación.
Impacto en la comunidad migrante en Florida y todo el país
Las organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes expresaron su preocupación por el impacto de estas redadas en la comunidad. Mariana Blanco, directora del Guatemalan-Maya Center, informó que al menos 20 personas fueron arrestadas en situaciones cotidianas.
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Por otro lado, el ICE enfrenta limitaciones en su capacidad de detención y algunos inmigrantes fueron liberados bajo programas de monitoreo debido a la falta de espacio en los centros de detención. No obstante, el gobierno aseguró que Venezuela aceptó recibir de vuelta a sus ciudadanos, lo que podría acelerar algunas expulsiones en los próximos meses.