Julio Preciado vivió un año de muchas complicaciones y problemas de salud, pues estuvo en el hospital debido a un trasplante de riñón, una infección testicular, neumonía y un absceso en los testículos.
Sin embargo, pocos saben que el cantante de música regional mexicana, también vivió otra enfermedad en noviembre. El artista, de 54 años, se sinceró para un programa de espectáculos, donde contó que tuvo dengue:
Estoy aguantando el último tramo de 2020 porque ha sido muy duro para mi desde el 13 de enero hasta la fecha. A ver como nos pinta el nuevo año…
Lo último que me pegó fue dengue, en el mes de noviembre, pero ya no quise ni comunicarlo, va a decir la gente que estoy salado, luego no van a venir ni a saludarme, fue un dengue que no pude sacarlo de manera normal
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Julio confesó que, el dengue podría haber sido muy peligroso para su salud debido al trasplante de riñón que tuvo hace algunos meses:
Cuando te pica el mosco, el dengue lo sacas a través de la fiebre, la calentura y a mí no me está permitido que me de fiebre por mi trasplante. Si se me sube la temperatura arriba de 38 o 39 grados corro el riesgo de que el riñón sufra algún rechazo
Des los 5 días que me pude haber curado tuve que aventarme 30 días acostado en mi cama
Y es que, tras los múltiples problemas de salud que vivió en meses anteriores, Preciado expresó que llegó a pensar en la muerte:
Claro que sí piensas en la muerte. Yo una vez le dije a Dios ‘Si no me vas a aliviar, llévame’. Ver sufrir a mi familia era lo que más me dolía
No quise que se hiciera público, la verdad es que hasta empiezas a renegar con Dios ¿Por qué si Dios te ha dado la vida y un milagro, ahora otra vez estoy en cama? Dicen que la Dios le manda las peores batallas a sus mejores guerreros
En otros temas, el sinaloense trascendió que sus múltiples operaciones y cuidados médicos generaron fuertes gastos que afectaron su economía.
Por más capital que tengas, el dinero se acaba. Ahorita estamos tratando de vender una de mis propiedades para poder salir adelante en los meses de enero y febrero; espero irme a trabajar en marzo. No sé cómo le hemos hecho, pero hemos salido adelante con los gastos. Mi tratamiento fue carísimo…
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