Hablar de Flor Rubio es hablar de constancia. Desde hace años, su rostro se ha vuelto parte del paisaje matutino en Venga la Alegría, donde siempre tiene la última palabra cuando se trata de noticias del espectáculo.
Pero detrás de cada nota, hay una mujer con años de trabajo, una trayectoria firme y una formación profesional que pocas veces se menciona.
¿Cuántos años tiene Flor Rubio en 2025?
Aunque cueste creerlo por lo bien que se mantiene, Flor Rubio tiene 53 años. Nació un 5 de agosto de 1971 en la Ciudad de México (CDMX), y ha estado presente en los medios desde mucho antes de que las redes sociales existieran.
Se ha adaptado a los cambios de la industria sin perder su estilo: serio cuando tiene que serlo, pero siempre cercano al público. Con el tiempo, ha sabido construir una imagen creíble, equilibrando muy bien el chisme de espectáculo con el respeto que cada historia merece.
¿Qué estudió Flor Rubio y en qué universidad?
Antes de convertirse en una figura reconocida en la televisión, estudió Ciencias de la Comunicación en la FES Acatlán, de la UNAM. Su paso por la universidad fue el inicio de un camino que, con los años, la llevó a ocupar espacios importantes en radio, prensa escrita y, por supuesto, televisión.
A diferencia de otras personalidades del medio, Flor ha trabajado desde una base académica sólida, combinando el rigor periodístico con el ritmo que exige el entretenimiento.
¿Cómo fue construyendo su carrera en televisión?
Flor no llegó de la noche a la mañana a Venga la Alegría. Ya había trabajado en medios mucho antes, especialmente en espacios dedicados al análisis del espectáculo. Ha conducido programas, hecho entrevistas memorables y se ha ganado el respeto de colegas y artistas por igual.
Más que solo una conductora, es una periodista que sabe cómo manejar la información con criterio y sensibilidad, algo que se agradece en un medio donde no siempre hay espacio para la pausa y la reflexión.
A lo largo de los años, ha mantenido su lugar sin escándalos, sin poses y con un estilo muy suyo, que le ha dado credibilidad y cercanía. Y eso, en el mundo del espectáculo, vale oro.