La Navidad y el Año Nuevo son dos de las celebraciones más importantes que existen en México y el mundo, por lo que son millones de familias las que se juntan para pasar un rato saludable en compañía de obsequios, adornos y la siempre importante cena navideña, la cual se acompaña con deliciosos y exquisitos platillos.

Curiosamente, existe una teoría que indica que, precisamente en esta fecha, es cuando las personas se enfadan más con sus familiares, lo cual ocasiona una serie de grupos, problemas y desencuentros entre ellos. Ahora bien, ¿qué opina la psicología de los conflictos de Navidad?

¿Por qué las personas se pelean más en Navidad, según la psicología?

Dolores Fernández Pérez, profesora del Departamento de Psicología de la Universidad de Castilla - La Mancha, explica que se ha identificado un patrón cerebral que se relaciona por completo con la sensación de pertenencia durante esta época de Navidad, por lo que, si esta no es efectiva como la persona lo desea, puede generar malentendidos o problemas importantes.

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Del mismo modo, la forma de mostrar la empatía de cada persona en las relaciones sociales puede generar algunos conflictos entre aquellos seres que buscan patrones de comportamientos distintos o, bien, que generan emociones mucho más palpables en esta época navideña a través de abrazos, palabras u obsequios.

En este sentido, es precisamente la etapa de regalos la que puede generar una especie de narcisismo entre algunas personas, según indica Fernández Pérez. De acuerdo con su lógica, la rivalidad entre el reconocimiento social y el deseo de recibir algo “idóneo” a la personalidad de cada ser, puede generar altercados que se presentan con más fuerza en estas fechas.

¿Por qué existen más tensiones familiares durante la Navidad?

La experta en psicología menciona que la celebración por Navidad tiende a intensificar aún más las dinámicas que ya existen tales como los intentos de control, el deseo de sentirse incluído en un plan y la necesidad de atención, mismas que si no son retribuidas pueden generar tensos ambientes entre las personas dentro de un mismo espacio.