Rosalía lo hizo de nuevo. La cantante española volvió a romper esquemas y esta vez lo hizo desde las calles de Nueva York, Estados Unidos, donde fue vista con un look de moda urbana que incluía unas botas de fútbol (sí, con tacos incluidos), dejando claro que el streetwear está entrando en una nueva fase.
Su elección: unas New Balance 442 Pro FG V2 con detalles fluorescentes que no pasaron desapercibidos. A partir de ahí, el hashtag #BootsOnlySummer empezó a escalar posiciones en redes y ya se perfila como el hit del verano.
Lejos de ser una elección aleatoria, este look confirma una tendencia que ya venía cocinándose desde hace meses: la moda urbana está reinterpretando elementos deportivos de forma radical, llevándolos más allá de su uso original.
Y si algo ha demostrado Rosalía es que no solo sigue tendencias… las impone.
¿Por qué los zapatos de fútbol están conquistando el streetstyle?
La fiebre por las botas de fútbol no empezó con Rosalía, pero sí fue ella quien terminó de consolidarla. Desde hace meses, firmas como Louis Vuitton, Balenciaga y Prada habían presentado sus propias versiones de este calzado en pasarela. Adidas también ha explorado el concepto en sus líneas más experimentales.

Aunque pueda parecer poco práctico llevar tacos de futbol por la ciudad, esta tendencia no va de comodidad, sino de intención y estilo. Se trata de resignificar prendas que antes solo pertenecían al ámbito deportivo y darles un nuevo código dentro del mundo de la moda.
El footballcore, como ya ocurrió con el balletcore, está reclamando su lugar en el armario diario.
Te puede interesar: Belinda en Cannes: ¿Cuánto cuesta el icónico vestido que llevaba en la alfombra roja?
El lente indiscreto de Ventaneando captó a la Rosalía en el gimnasio.
Esta nueva ola no salió de la nada. El footballcore lleva tiempo ganando terreno: desde la integración de camisetas de equipos en looks de calle hasta colaboraciones de moda con clubes deportivos.
Un ejemplo claro fue la alianza de Rosalía con el FC Barcelona durante la era Motomami, que ya mostraba su interés por conectar con esta estética.
Ahora, con los tenis como nuevo objeto de deseo, la tendencia confirma que el verano 2025 será todo menos predecible. Atrás quedaron los looks etéreos del balletcore; ahora, el estilo pisa más fuerte.