La violencia en Tabasco sigue dejando un saldo alarmente, que refleja la persistente disputa entre grupos criminales que buscan controlar el estado, haciendo especial énfasis en La Barredora.
Entre el lunes y el miércoles de esta semana, se registraron al menos cuatro asesinatos, generando pánico en la población, ante un panorama que está lejos de ser esperanzador.
¿Qué está pasando con la violencia en Tabasco?
En la ranchería Anacleto Canabal, perteneciente al municipio de Centro, dos hombres presuntamente relacionados con el narcomenudeo fueron asesinados a tiros por sujetos que se desplazaban en una camioneta negra.
Otros hechos violentos ocurrieron en la colonia Gaviotas y en la ranchería Aquiles Serdán, del municipio de Jalapa, crímenes que las autoridades han vinculado a la organización criminal conocida como “La Barredora”.
“Nos hemos dado cuenta que a pesar del despliegue de seguridad, siguen operando, seguimos viendo ejecuciones, descuartizados, asaltos y cobro de piso” Alejandro de la Cruz, abogado y ex policía estatal.
La Barredora y la herencia del poder político
“La Barredora” es considerada una de las organizaciones criminales más influyentes de Tabasco, con raíces que se remontan a alianzas entre criminales y funcionarios durante el sexenio anterior.
Entre ellos, Hernán Bermúdez, alías “Comandante H”, o en su doble papel, también el exsecretario de Seguridad nombrado por Adán Augusto López Hernández.
La disputa por el territorio entre los grupos que surgieron tras el control de Bermúdez mantiene un clima de violencia constante.
Ulises Pinto, alias “El Mamado”, busca ser testigo colaborador
Un mes después de su detención, Ulises Pinto Madera, conocido como “El Mamado” y segundo al mando de “La Barredora”, habría solicitado a la Fiscalía General de la República convertirse en testigo colaborador.
Según fuentes cercanas a las investigaciones, Pinto Madera ofrecería información sobre los nexos entre la organización criminal y políticos de alto nivel que permitieron su operación con impunidad durante años.
Esta posible colaboración podría ser clave para desarticular la red de protección que operó durante el sexenio de 2018 a 2024, incluyendo a quienes continúan negando cualquier responsabilidad.