Buscar un camino en la vida, vivirla, encontrar aliento en la inmensidad de las cosas y saber que aunque ante el mundo somos pequeños, no hay nada que no pase a tiempo. El alpinismo es buena opción para encontrar ese camino.
Alpinismo, un deporte donde conformarse no es una opción
“Inicie más o menos a la edad de 8 años, un accidente en 2004 me trae a la montaña, cuando yo me accidento me acuerdo que era para que me hubiera pasado otra cosa, cuando voy a Perú y logro el nevado pisco encuentro la respuesta de porqué tuve que pasar ese accidente para llegar a esa cima”, recuerda Víctor Téllez, alpinista.
Víctor Téllez es un alpinista poblano que encontró su propósito en la vida, la vida no para y eso es algo que tiene claro pues el conquistar nuevos horizontes requiere un extra a lo que la mayoría no está dispuesto a hacer.
“Todo se puede en la vida, todo está en la mente, si pones a trabajarla todo lo vas a lograr”, aconseja Víctor desde lo alto de una montaña.
El alpinismo es un reto de vida
Este camino ha llevado a Víctor a compartir la emoción del alpinismo y de retarse a lo grande con más de una persona.
“Lo más bonito es que crean en ti, eso hace que la gente vaya creyendo en ti”, dice entusiasmado Víctor.
Todo reto conlleva un riesgo y el tiempo ha hecho que Víctor este consciente de ello, sin dejar que cunda el miedo.
“Cuando vi un accidente en el 2017 cerca de llegar a la cumbre un chavo se resbaló. Es un momento en el que dices que hago aquí, también puedes tener un accidente”, reconoce los riesgos Víctor.
En un mundo lleno de montañas, conformarse no es una opción.
“Hagas lo que hagas no tengas miedo, porque todo esto se va rápido, llegamos a cierta edad con arrepentimientos, porque no lo hice, hazlo, sea lo que sea inténtalo, nunca dejen de intentarlo y da todo, todo se puede”, finaliza un Víctor motivado.