Comer doce uvas al compás de las doce campanadas es el ritual por excelencia para recibir el Año Nuevo en México. Sin embargo, pedir esos doce deseos costará mucho más este 2025: la tradición se enfrenta a una dura realidad económica donde el precio de este fruto se ha disparado al doble en menos de un mes.

La temporada decembrina trajo consigo el encarecimiento de la canasta básica , y la uva no fue la excepción. En mercados y tianguis, el kilo de uva verde —la más buscada por ser sin semilla— pasó de costar entre 80 y 100 pesos a venderse hasta en 150 o 160 pesos.

Para los comerciantes, el aumento de precio también representa un riesgo de ventas bajas. Anabel Villar, locataria, explica el cambio drástico:

"Subió 80 pesos más por kilo... La gente llega, pregunta y mejor agarra y se va", comenta, reconociendo que el costo desanima a los compradores.

Uvas verdes: Un esfuerzo para la cena de Fin de Año

Para familias numerosas, cumplir con la tradición implica un desembolso que muchos consideran una "feriesota", pudiendo gastar cerca de 500 pesos solo en la fruta.

Hedilia Hernández, ama de casa, resume el sentir de muchos mexicanos que hacen malabares con el presupuesto :

"Por la economía que tenemos, ahorita ve que no alcanza el sueldo, hay que ver cómo vamos a hacer para la cena de fin de año... aunque sea una cenita, algo sencillo".A pesar de los precios, el espíritu festivo persiste. Magdalena Mendoza, otra consumidora, asegura que han tenido que ahorrar con anticipación para no perder la costumbre: "Tratamos de hacer nuestro ahorrito para poder brindar y degustar las 12 uvas".

Ante el precio de la uva verde, los comerciantes sugieren buscar alternativas como la uva roja, que se puede encontrar rondando los 100 pesos el kilo. Aunque tiene semilla, permite mantener el ritual sin golpear tanto la billetera.

Al final, como dicen los propios compradores, lo importante es pasar un momento de armonía con los seres queridos, aunque este año los deseos salgan más caros.