Silvio Berlusconi, el extravagante multimillonario y exprimer ministro de Italia, que una vez se describió a sí mismo como el “Jesucristo de la política”, muere en un hospital de Milán a la edad de 86 años, confirmó este lunes su oficina de prensa. Líderes de la política y del fútbol externan sus condolencias.
Falleció en el hospital San Raffaele, donde estaba ingresado desde el viernes pasado tras sufrir problemas de salud relacionados a la leucemia que padecía hace tiempo y que se intensificaron durante el fin de semana. Tres semanas antes había recibido el alta luego de pasar 44 días ingresado por una pulmonía. Esta vez la situación se agravó y se precipitó el desenlace.
Líder empresarial en las telecomunicaciones y en el fútbol
Empresario de la construcción, magnate de las telecomunicaciones, presidente más exitoso del fútbol italiano, primer ministro con el récord de permanencia en el cargo. Odiado y amado por igual. Admirado y temido. Genial hombre de negocios para algunos, criminal con vínculos con la mafia para otros. Silvio Berlusconi fue todo esto y mucho más: el hombre que dividió a los italianos como nadie hizo en más de 70 años de vida republicana.
Fue elegido primer ministro tres veces
El político, que durante mucho tiempo fue considerado como la figura pública más pintoresca de Italia, fue elegido primer ministro tres veces y sirvió durante un total de nueve años, más que nadie desde el dictador fascista Benito Mussolini.
Envuelto en escándalos políticos, financieros
Cariñosamente apodado “Il Cavaliere” (El Caballero), su carrera estuvo marcada por una serie de escándalos políticos, financieros y personales, muchos de los cuales lo llevaron a los tribunales.
Nacido en Milán, Italia, el 29 de septiembre de 1936 en una familia de clase media, sobre su escandalosa vida se ha escrito de todo.
Los años juveniles repletos de anécdotas y experiencias -casi todas incomprobables- que él mismo difundió con notable talento de fabulador: ayudante de proyección en un cine, cantante a bordo de los cruceros, vendedor de escobas puerta a puerta, estudiante de intercambio en la Sorbona de París...
Pertenencia a la logia P2
Un ascenso con no pocos puntos oscuros. La pertenencia a la logia P2, la organización clandestina liderada por Licio Gelli que buscaba subvertir el Estado italiano. Y los vínculos con la mafia. En los años 70, Vittorio Mangano, un asesino múltiple afiliado a la Cosa Nostra, trabajó en una de sus mansiones. Marcello Dell’Utri, su histórico brazo derecho, fue condenado en 2014 por ser el mediador entre la mafia y el propio Berlusconi.
En los 90 Silvio Berlusconi ingresó en la política
A principios de los 90 ingresó en la política. Con su intuición habitual, Berlusconi aprovechó el “Mani pulite”, el escándalo de corrupción que embistió al líder socialista Bettino Craxi. El padrino político de Berlusconi, el hombre que desde el Gobierno favoreció su ascenso empresarial. Junto a Craxi fueron barridos los partidos tradicionales.
Berlusconi se presentó en las elecciones de 1994, con la promesa de realizar una “revolución liberal” y frenar el supuesto avance de los “comunistas”. Siempre adelantado, usó dos de los argumentos fuertes de las derechas contemporáneas.
Pocos lo advirtieron en ese momento. Gracias a su poderío mediático, una comunicación innovadora y a su capacidad de interpretar el cambio de época en un país cansado de los escándalos y de una clase política autorreferencial, en esas primeras elecciones Berlusconi arrasó. Pero ese primer gobierno duró apenas un año y tuvo que esperar 2001 para volver a ejercer como Primer Ministro, tras otra elección arrolladora. Esta vez completó todo el mandato: fue el Ejecutivo más largo de la historia republicana de Italia.
Escándalos de corrupción y de abusos sexuales con menores
Fue juzgado por cargos que van desde evasión de impuestos y soborno hasta corrupción y tener relaciones sexuales con una prostituta menor de edad. Pero solo se mantuvo un caso: una condena de 2012 por evasión de impuestos en un acuerdo que involucraba derechos de televisión.
Berlusconi fue expulsado del parlamento en 2013. Pero nunca se dio por vencido en la lucha, resurgió a principios de 2018 como una especie de anciano estadista abuelo, el rey de una alianza de derecha que involucra a su partido Forza Italia.
Después de que el Tribunal de Milán le otorgara la “rehabilitación” más tarde ese año, levantando efectivamente la prohibición de reingresar a la política que estaba vigente luego de su condena por fraude fiscal en 2012, anunció que se postularía para un escaño en el Parlamento Europeo.
Permanecía como diputado al Parlamento Europeo
Fue elegido en mayo de 2019, a los 83 años, y permanecía en el cargo como diputado al Parlamento Europeo en el momento de su muerte.
Silvio Berlusconi también llevó a su partido Forza Italia, que revivió en 2013 tras dejar el partido Pueblo de la Libertad, a la victoria con la coalición de centroderecha con Giorgia Meloni y Matteo Salvini en septiembre de 2022, aunque no tenía cartera de gobierno.
Condolencias de la clase política y del fútbol
La Primera Ministra de Italia, Giorgia Meloni, lamentó el fallecimiento de Silvio Berlusconi y ensalzó su labor al frente del país como primer ministro. “Un luchador. Con él, Italia ha aprendido a no rendirse jamás”.
El primero en llorar la muerte de Berlusconi fue Matteo Salvini. El ministro del Interior italiano y presidente del Consejo de Ministros ensalzó la figura de Berlusconi con este mensaje publicado en Twitter.
“Hoy nos saluda un GRAN ITALIANO. Uno de los más grandes de todos los tiempos, en todos los campos, desde todos los puntos de vista, sin igual. Pero sobre todo hoy pierdo a un gran amigo. Estoy rota y rara vez lloro, hoy es uno de esos días.
Guardo como un regalo precioso el valor de su amistad, sus consejos, su generosidad, su respeto, su genio, sus raros y cariñosos reproches seguidos inmediatamente de cumplidos y atenciones únicas.
Equipos de fútbol externan respeto
El entrenador del equipo de fútbol del Real Madrid, Carlo Ancelotti, ha lamentado el fallecimiento de Silvio Berlusconi. Durante su etapa en el AC Milan, ambos coincidieron y llevaron al club rossonero a la cima del fútbol europeo.
“La tristeza de hoy no borra los momentos felices vividos juntos. Queda infinita gratitud al presidente, pero sobre todo a un hombre irónico, leal, inteligente, sincero, fundamental en mi aventura como futbolista primero, y luego como entrenador. Gracias presidente”.
El equipo de fútbol AC Milan, club que triunfó bajo el mandado de Silvio Berlusconi, llora la muerte del exprimer ministro italiano y expresidente del club, con el que cosechó buena parte de su mejor palmarés a lo largo de su historia.
“El AC Milán, profundamente entristecido, lamenta el fallecimiento del inolvidable Silvio Berlusconi y abraza con afecto a su familia, colaboradores y amigos más cercanos.
Durante ese tiempo estuvo acompañado en todo momento por su novia, la diputada Marta Fascina, 53 años más joven, y recibió las visitas de sus más cercanos colaboradores, de sus socios, como Giorgia Meloni, y de su familia, como sus cinco hijos, además de numerosos amigos.
Desde el hospital, el magnate incluso llegó a aparecer en dos vídeos: uno para animar a los italianos a votar en las elecciones locales y otro para intervenir en la convención de su partido, en el que aseguraba estar “listo” para regresar a la batalla.
El parte médico de su doctor de confianza, Alberto Zangrillo, reveló que Berlusconi estaba siendo tratado de una “infección pulmonar” causada por “una condición hematológica crónica de la que es portador desde hace tiempo: la leucemia mielomonocítica crónica”.
Leucemia mieloide crónica, causa de la muerte de Berlusconi
La leucemia mieloide crónica es una forma de cáncer de la sangre que puede aparecer sobre todo en personas mayores de 60 años y los médicos precisaron entonces que se estaba sometiendo a “tratamiento citorreductor especializado” y a quimioterapia.
A lo largo de los años, Berlusconi había sido hospitalizado en varias ocasiones: en una de ellas se le implantó un marcapasos, mientras que también fue ingresado por la covid-19 y en una las más recientes, en enero de 2022, fue ingresado por una infección urinaria.