Los senadores del PRI informaron que no acudirán a la ceremonia de toma de protesta de los nuevos integrantes del Poder Judicial de la Federación.

La bancada priísta justificó su decisión señalando que no convalidarán un proceso que, a su juicio, “en lugar de promover la independencia judicial, impone criterios que afectan el equilibrio de poderes y debilitan la vida democrática de México”.

En consonancia con la dirigencia nacional del partido, encabezada por Alejandro Moreno, los legisladores afirmaron que esta postura responde a un principio de congruencia política, defendiendo así su compromiso con la protección de las instituciones.

Reforma judicial, un mecanismo de control político: Alerta oposición

A través de un comunicado de prensa, los senadores insistieron en que la reforma judicial impulsada por Morena se convirtió en un instrumento para ejercer control político.

Según el documento, “se adueñaron del Poder Judicial y lo sometieron a intereses de partido, anulando los contrapesos que garantizan la libertad y los derechos de los mexicanos a base de acordeones que niegan ahora y desconocen”, señalaron los legisladores liderados por el coordinador Manuel Añorve.

Ratificaron que “no avalarán un modelo que concentra decisiones en un sólo poder y que reduce el ejercicio pleno de la justicia, mientras deja indefensos a todos los que se oponen al régimen”.

En este sentido, enfatizaron su compromiso de salvaguardar las normas y leyes fundamentales para la democracia: “No vamos a normalizar el secuestro y destrucción de las normas y leyes que son base fundamental para la democracia”.

Ganadores de la elección judicial tomarán sus cargos

A pesar del rechazo del PRI, los ministros de la Corte, junto con más de 800 jueces y magistrados, asumirán oficialmente sus cargos durante la noche del 1 de septiembre. Estos funcionarios fueron electos por apenas el 13% de la población en los recientes comicios judiciales.

La toma de protesta se llevará a cabo en la Cámara de Senadores a las 19:30 horas, mientras que la sesión solemne está programada para las 22:00 horas. La ceremonia coincide con el primer informe de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, que se realizará el mismo lunes, marcando un día de gran relevancia política en el país.