La diversidad de género aún es castigada en varios países del mundo; en algunos incluso la homosexualidad es sancionada con pena de muerte.
Muchas naciones encarcelan a las personas lesbianas, gays, bisexuales, trámsgenero y demás de la comunidad LGBTI porque la leyes de los países penalizan la orientación sexual y un beso podría ser considerado un delito grave.
De acuerdo con Amnistía Internacional, hay algunos gobiernos que aceptan la tortura para que las personas cofiensen su homosexualidad y después “curarlos”. Los castigos por homosexualidad son variados y en 11 países aún se considera la pena de muerte, aunque no todos la aplican.
En torno a 70 países tipifican como ilegales las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo, y la gran mayoría las castigan con penas de cárcel. Por si fuera poco, además, la comunidad LGBTI también sufren disciminación y crímenes de odio.
“El discurso homofóbico de muchos gobernantes, políticos, religiosos y medios de comunicación fomenta un clima de intolerancia y discriminación contra la diversidad sexual de lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales, e incluso alienta la violencia contra esas personas”, expresó Amnistía Internacional .
Países que condenan con pena de muerte la homosexualidad
La pena de muerte está permitida como castigo para la homosexualidad en Brunei, Irán, Mauritania, Nigeria, Arabia saudita y Yemen; aunque en Nigería solo está permitida en los 12 estados del norte del país.
En otros cinco países como Qatar, Afganistán, Pakistán, Somalia y Emiratos Árabes la pena de muerte es una posibilidad, la cual se puede aplicar dependiendo de la interpretación de la ley islámica.
Irán y Arabia Saudita son los países que más reportan castigos de pena de muerte y los que con más frecuencia la aplican.
En países como Letonia, Lituania, Bulgaria, Croacia, Serbia, Hungría, Moldavia o Rusia es frecuente la vulneración del derecho a la libertad de expresión y reunión o los crímenes de odio contra la comunidad LGBTI.