Beber demasiado alcohol, ya sea en una sola ocasión o con el tiempo, puede causar graves problemas de salud. Este puede afectar a todo el cuerpo, pero los órganos más afectados son el cerebro y el corazón .
El alcohol afecta al cerebro interfiriendo con las vías de comunicación entre las neuronas. Esto puede causar cambios en el estado de ánimo, el comportamiento y la capacidad de pensar con claridad. En casos extremos, el consumo excesivo de alcohol puede provocar daños cerebrales permanentes, como la demencia.
Esto le sucede al cuerpo si dejas de tomar alcohol
Cuando dejas de beber alcohol, tu cuerpo comienza a recuperarse de los efectos negativos de la bebida. Esto puede traer consigo una serie de beneficios para la salud, que incluyen:
- Un sueño más reparador: El alcohol puede interrumpir el sueño, haciendo que te sientas cansado y somnoliento al día siguiente. Cuando dejas de beber, tu cuerpo puede descansar más profundamente y despertarse sintiéndote más descansado.
- Un sistema inmunológico más fuerte: El alcohol puede debilitar el sistema inmunológico, haciendo que sea más probable que te enfermes. Cuando dejas de beber, tu cuerpo puede combatir mejor las infecciones.
- Un estado de ánimo mejorado: El alcohol puede causar ansiedad, depresión y otros problemas de salud mental. Cuando dejas de beber, puedes experimentar una mejora en tu estado de ánimo y en tu capacidad para lidiar con el estrés.
- Una piel más saludable: El alcohol puede deshidratar la piel y causar arrugas. Cuando dejas de beber, tu piel puede comenzar a verse más saludable y radiante.
Además de estos beneficios, dejar de beber también puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como las cardíacas, cáncer y enfermedad hepática.
Si estás pensando en dejar de beber, habla con tu médico. Ellos pueden ayudarte a desarrollar un plan para hacerlo de manera segura y exitosa. Afortunadamente, las enfermedades causadas por el abuso de alcohol se pueden prevenir reduciendo o, mejor aún, dejando de beber alcohol.