Entre las tendencias en miles de jóvenes dentro de México y alrededor del mundo, hay una que está generando controversia y preocupación en padres de familia y sistemas de salud, pues hoy en día hay miles de personas que durante celebraciones, fiestas o reuniones, están mezclando el alcohol con bebidas energéticas, algo contraproducente al interior del organismo que puede provocar complicaciones médicas.
Al respecto y desde hace varios años, la Secretaría de Salud de México (SSa) ha publicado documentos con explicaciones sencillas para comprender las posibles reacciones de estas bebidas preparadas, pues advierten que su combinación puede llevar a una intoxicación en el hígado.
¿Qué pasa si bebo alcohol con una bebida energética?
Lo primero que señala la Secretaría de Salud es que todo abuso por separado de estas bebidas también es perjudicial para la salud; sin embargo, solo cuando excedes en la ingesta de bebidas energéticas, las reacciones también podrían ser las siguientes:
- Aumentan el ritmo cardíaco, pudiendo producir arritmias en personas con problemas de corazón.
- Aumentan la presión arterial, produciendo dolores de cabeza, zumbido de oídos o sensibilidad a la luz.
- Producen dificultad para dormir, llegando a producir insomnio.
- Tienen un efecto diurético, ya que aumenta la producción de orina, y con ello te deshidratas más rápido.
- Aumentan la glucosa en sangre, lo cual puede ocasionar una descompensación en personas diabéticas.
Por este motivo se recomienda el uso moderado y responsable de bebidas energéticas, en especial si se llega a la combinación con alcohol, pues según indica la dependencia de salud, al mezclar en un trago bebidas alcohólicas con energizantes, se aumenta considerablemente el riesgo de sufrir una intoxicación hepática.
Si en una noche bebes en exceso alcohol con bebidas energéticas, el resultado podría ser una intoxicación hepática, el cual tendría como síntomas dolor de cabeza, dilatación de las pupilas, vómito, taquicardia e hipertensión arterial; mientras que al interior se inflamaría el hígado y podría derivar en otras enfermedades.
De igual forma, la Secretaría de Salud incluye entre los principales riesgos que, debido a la contraposición del efecto estimulante de las bebidas energéticas y depresor del alcohol, se puede desarrollar una falsa sensación de sobriedad y por lo tanto disminuye la capacidad de percibir cuanto alcohol se ha consumido.
Fue conocida como la enfermedad de los ricos porque podían comer carne en exceso y disfrutar bebidas alcohólicas. Ahora, expertos saben que "la enfermedad de la gota" es ocasionada por el ácido úrico en la sangre y puede deformar las articulaciones.@Galicia_Edgar te cuenta más. pic.twitter.com/pxlJu2ftAp
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) July 27, 2022
Ante esta combinación, incrementa el riesgo de sufrir una intoxicación alcohólica y caer en los conocidos efectos irresponsables del exceso de alcohol, como conducir en estado de ebriedad y conductas de riesgo para la salud.
De acuerdo con un estudio elaborado por el International Journal of Neuropsychopharmacology, la mezcla de alcohol con bebidas energéticas genera una falsa sensación de seguridad en las personas que las consumen, lo que incita a la conducción de un automóvil sin estar sobrio.
¿Qué continenen las bebidas energizantes?
Las bebidas energéticas o energizantes contienen un alto grado de azucar combinado con cafeína y vitaminas de complejo B, los cuales provocan un efecto estimulante en el sistema nervioso central, por lo que provocan la sensación de estar más despierto y concentrado.