La madrugada de este lunes 19 de mayo, un grupo armado, presuntamente del Cártel de Santa Rosa de Lima, irrumpió en una plaza del municipio de San Felipe, Guanajuato, donde siete jóvenes fueron alcanzados por las balas.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 2 de la mañana en la comunidad de San Bartolo de Berrios, alertando de inmediato a la población y a policías municipales. Se reporta que entre las víctimas, hay 2 menores de edad.
Masacre en San Bartolo de Berrios: Investigan asesinato de jóvenes
De acuerdo con testigos, hombres fuertemente armados abrieron fuego de manera indiscriminada contra las personas que se encontraban en la plaza, después de que finalizara un evento en conmemoración al 10 de mayo.
Los cuerpos quedaron tendidos en el suelo, colocados en aparente orden por los agresores, según narraron fuentes extraoficiales.
Horas después del ataque, el Cártel Santa Rosa de Lima se adjudicó el multihomicidio, colocando mantas en glorietas de San Bartolo y en la cabecera municipal.
Aunque la Fiscalía General del Estado no ha confirmado oficialmente la autoría, se abrió una carpeta de investigación por lo que ya es considerada la masacre número 12 en Guanajuato en lo que va del año.
Condenan multihomicidio en San Bartolo de Berrios, Guanajuto
En un comunicado, el gobierno municipal de San Felipe condenó enérgicamente el ataque y llamó a la ciudadanía a denunciar cualquier acto delictivo a los números de emergencia.
El secretario de seguridad y paz de Guanajuato, Juan Mauro González, advirtió que los grupos delictivos están buscando extender su presencia a municipios menos vigilados, aunque ya se trabaja para hacer frente.
Al respecto, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) emitió un comunicado en el que expresó su dolor ante la tragedia:
“Con profundo dolor y consternación, los Obispos de México alzamos la voz. Esta masacre, una más entre tantas que se repiten con dolorosa frecuencia, es un signo alarmante del debilitamiento del tejido social, la impunidad, y la ausencia de paz”.
Los obispos exhortaron a las autoridades a garantizar la seguridad y la justicia, y pidieron a la sociedad no caer en la indiferencia ni la desesperanza.
La Arquidiócesis de León también se pronunció sobre el crimen, destacando que el ataque se produjo al final de una celebración religiosa organizada por la parroquia local. “Estamos indignados, consternados y condenamos este hecho. Exhortamos a nuestras autoridades a dar con los responsables y evitar que estos hechos se repitan”.
