Gran Bretaña registró este martes el día más caluroso de su historia, la temperatura alcanzó un máximo de 40.2 grados Celsius, según datos provisionales de la Met Office.
Las cifras del servicio meteorológico del Reino Unido mostraron que Charlwood, Surrey, alcanzó el nuevo máximo el martes por la mañana, superando el récord anterior de 38.7°C establecido en 2019.
Se produce cuando los británicos se enfrentan al segundo día de una ola de calor extremo, que está causando interrupciones generalizadas y aumentando el riesgo de incendios forestales.
Advertencia roja de calor extremo
El Servicio meteorológico emitió durante la mañana una advertencia roja de calor extremo por las altas temperaturas que se presentarían durante el día.
Las autoridades de salud instaron a las personas a tomar precauciones, como permanecer en el interior y beber mucha agua.
Alerta máxima por incendios forestales
El país también está en alerta máxima por incendios forestales, con el sureste de Inglaterra en “peligro muy extremo”, según el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales.
La noche más calurosa del país
Millones de británicos soportaron la noche más calurosa del país el lunes, con temperaturas que se mantuvieron por encima de los 25 °C en algunos lugares, superando el récord nocturno anterior de 23.9 °C registrado en Brighton en 1990.
Siguió a un día de calor extremo el lunes, durante el cual se alcanzó un máximo de 38.1 °C en Suffolk, en el este de Inglaterra, por debajo del récord del Reino Unido.
Muchas partes de Europa y el norte de África también están experimentando temperaturas extremas, con incendios forestales en Francia, España, Portugal, Grecia y Marruecos.
Las compañías de agua en el sur de Inglaterra informaron un aumento “extraordinario” en la demanda debido al clima, lo que, según dijeron, podría provocar una baja presión o incluso una interrupción del suministro.
Las altas temperaturas en Gran Bretaña provocaron un caos en los viajes para los viajeros y los turistas, ya que se detuvieron cientos de servicios.
Las pistas tanto en el aeropuerto de Luton de Londres como en la RAF Brize Norton en Oxfordshire se vieron afectadas por el calor, lo que provocó el desvío de aviones y la cancelación de vuelos.
Mientras tanto, los servicios ferroviarios se vieron muy afectados, con rieles torcidos y fallas en los sistemas de cables aéreos. En algunas áreas, se impusieron cancelaciones y límites de velocidad de 20 millas por hora.
El secretario de Transporte de Gran Bretaña, Grant Shapps, dijo a la BBC que la red ferroviaria del país no podía manejar el calor extremo y agregó que las actualizaciones para ayudar a los servicios a hacer frente a las temperaturas extremas tomarían “muchos años”.
La Oficina Meteorológica del Reino Unido ha dicho que el cambio climático ha hecho que las temperaturas extremas en el país sean 10 veces más probables.